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Lev- ¡Yo sé que les encantaras! -te lajaba hasta la entrada, la había paseado por todo el Nekoma-
— ¿Seguro de lo que decís?, no estoy nada convencida.. -bufó y hacia fuerza para deterne a su hermano-
•Tratas de luchar con algo imposible, Lev era tú hermano y median prácticamente lo mismo, solo que él te sacaba 2cm (o sea; Lev 1,94. Tú 1,92), compartían las mismas características como con Alisa. Teniendo la medida y la contextura perfecta para voley, era alguien nula para el deporte, preferias verlo antes que jugarlo, obviamente llego a ser pasatiempo pero te negaste a seguir.
Lev al entrar al Nekoma siempre te habló de que no habia Mánagers y todas las veces que te habló sobre ello era una indirecta suposición que te anotadas de Mánager, obvio te negabas hasta que hoy.. te llevó engañada al Instituto del Nekoma.•
Lev- ¡Chicos! -había entrado de un portazo al club y con una sonrisa habló- ¡Les presento a mi hermana! -te colocó delante de él y todos se acercaron saludando amablemente-
Kuroo- Un gusto conocerte, no sabía que Lev tenia otra hermana linda -dedida una sonrisa amable-
Yamamoto— ¿Y qué te trae por acá? -miraba a la chica con cierta alegría-
Lev- ¡La traje porque pensé que seria buena Mánager para nuestro equipo! -exclamó con entusiasmo acompañado de las miradas sorprendidas de sus compañeros-
Yamamoto- ¡Eso es genial!, ¡Al fin una chica! -se fue a tomar de las manos con Kuroo y empezaron a saltar para celebrar-
— Es que no lo sé.. -llevas un mechón de pelo atras de tu oreja, al escuchar eso aquellos dos pararon de celebrar-
Lev- ¡Vamos inténtalo!, primero termina de conocer a todo el equipo faltan varios por conocer -te toma de los hombros tratando de poner animos, luego de darte una sonrisa pega un grito llamando algunos chicos.- ¡Kenma!,¡Nobuyuki!,¡Yaku!
—Lev, eso no cambiará nada.. simplemente no quiero hacer esto -hiciste una mueca de disgusto -
•Al instante de aquel grito, se acercaron aquellos tres, viste como un rubio teñido agitaba su mano suavemente indicando que saludaba pero un chico rapado hizo una reverencia y se presentó, lo cuál te sacó una sonrisa y al momento de posar la vista en el tercero, tu ojos se abrieron por el asombro, tu mente se paró por un segundo pero sentías que pasaron horas.•
