Realmente, ¿él es necesario? (Han Jisung X Rayito)

III. Clases, Seventeen y Café (parte 1)

Ambos hermanos se despidieron y Yoosung entró a casa, no se dio cuenta de que claramente sus padres estarían en casa, así que cuándo pasó por el pasillo para subir las escaleras que dan a su habitación le vieron.
-Yoosung, cariño ven un momento. -le dijo su madre-
-¿Si, mamá? -sonaba asustado, y claro como no estarlo si a veces no le tratan nada bien-
El chico se encontraba ya delante de su madre, ella solo le sonrió, le notó asustado y entendió perfectamente el porqué.
-Cariño, no estés asustado, no te haré nada. Yoongi me hizo entender todo, quiero que me des otra oportunidad. Solo quiero cuidarte esta vez.
-Mamá....-susurró Yoosung con lágrimas en sus ojos- Yo... quiero, yo solo quiero que me deis amor, tú y papá, es lo único que siempre quise.
-Es lo que haremos a partir de ahora, y te vamos a apoyar en lo de ser idol.
-¿¡En serio!?
-Si hijo, ya audicionaste, ¿no?
-Sí....en la empresa de Jyp Entertainment.
-Perfecto, ¿mañana tienes planes?
-Ah... mamá, tengo que ir al colegio y pensé después ir a ver a Mei y ayudarla con la cafetería.
-Oh, está bien, descansa pequeño.
Yoosung se despidió de sus padres y subió a su habitación, preparó la mochila para mañana, se lavó los dientes, para luego ponerse el pijama y meterse en la cama.
-Agh, hoy fue un día divertido, pero estoy muy cansado. -dijo el pequeño de los hermanos Min dejando su teléfono en la mesita que tenía al lado- bueno, a mimir.

Al día siguiente, a las 6:30 exactamente, Yoosung se encontraba durmiendo todavía, y las clases empezaban a las 7. Sus padres tenían que irse rápido y se olvidaron de despertarle, y claramente, su despertador no sonó. ¿Su única solución? Su hermana, pero ella, lamentablemente tampoco estaba en casa. Sí, estaba solo. Y llegaría tarde a clase si no se despertaba ya.
-Mierda, voy a llegar tarde a clase. -dijo Yoosung mientras soñaba con que llegaría tarde a clase-
Yoosung se despertó de golpe y al ver la hora en su móvil se levantó de golpe.
-Joder.....faltan treinta minutos....como no me dé prisa, no llegaré.
Yoosung salió como estaba de su habitación, se metió al baño para ducharse, al salir se puso el uniforme del instituto para luego bajar y desayunar rápidamente una manzana. Al terminar agarró su mochila, las llaves, y el teléfono junto a sus auriculares, para luego salir por la puerta y cerrar.
-A ver...veinte minutos quedan, okay, vamos. A correr.
El lindo chico de unos 1'77 metros, sí, un poco alto para tener solo catorce años, salió corriendo tan rápido haciendo que las personas que le veían se le quedaran mirando. Una de esas personas, era una madre que llevaba al colegio a su hija de siete años.
-Hija,¿ves a ese joven? -preguntó la madre señalando al pobre Yoosung-
-Sí, mami. ¿Por qué corre?
-Estará llegando tarde a clase. No quiero que seas cómo él. Esfuérzate en clase.
-Vale, mami. Te prometo que me esforzaré y no llegaré nunca tarde a clase.
-Muy bien, hija, así me gusta.
Pobre Yoosung, el pequeño Coreano de solo catorce años, había oído todo lo que decían de él al pasar por ahí.
Quedaban cinco minutos pero nuestro pequeño protagonista por fin ya estaba en el pasillo del instituto a punto de entrar a la clase.
Al entrar, su mejor amiga sonrió al verle y le hizo señas para que se acercará rápidamente. Tenía que contarle algo importante.
-¿Todo bien, Noona?¿Por qué te ves tan emocionada?
-Mi hermano dice que se pasará a por nosotros después de clase y nos llevará a su empresa. ¡Después iremos todos, es decir, todo Seventeen y nosotros dos a la cafetería!
-Ohhh, genial. ¡Quiero ver a los chicos!
-No me gusta que con el que mejor te lleves sea Minghao, me robas a mi hermano siempre.
-Lo siento, pequeña Mei.
-Soy tu Noona. Así que nada de "pequeña Mei".
-Está bien, está bien, Noona. Pero es que ya sabés.... Minghao y yo somos pareja.
-Cállate, ni en tus sueños te dejaría salir con mi hermano, no quiero que seas mi cuñado.
-Oye, oye, tranquila, era una broma. Tu hermano es solo un gran amigo.
-Eso espero. Además, eres demasiado pequeño como para salir con él.

Ambos estaban hablando sobre el hermano de la chica hasta que apareció el profe por la puerta, se había tardado media hora en aparecer, así que quedaban otros treinta minutos para que acabará la clase.
-Me podría haber quedado en casa para esto. -susurró Yoosung-
-¡Oye! Si no, no te hubieses enterado de lo de tu novio.
-Oh, ¿llamaste a tu propio hermano mi novio?
-Ays, calla. Maldito niño tan handsome que tengo por mejor amigo.
-Oh, me llamaste Handsome.
-No, te llamé "maldito niño", ah me faltó lo de pendejo.
-¿Así que soy un maldito niño handsome y pendejo?
-Exacto, eres eso.
-Oh, por la tarde veré si tu hermano piensa lo mismo. -dijo Yoosung guiñándole el ojo a su amiga-
-Como te acerques a MI queridísimo hermano, Xú Minghao, y te atrevas a coquetear con él, verás eh.
-Oh, qué miedo.
-Yo solo te aviso. Eres una persona muy hormonal para la edad que tienes.
-Oh, es verdad, se me olvidaba que tienes quince años y ya estás mayor. A mí me quedan nueve meses todavía para cumplir los quince.
-Ahg, no te rías de mí por ser mayor que tú.
-Bueno, vale, solo te digo, me besaré con tu hermano.
-Sigue soñando, que para eso es gratis. -habló la chica-

Ambos amigos dejaron de hablar para prestar atención a la clase, bueno, más bien para prestar atención a lo que quedaba de clase. Ya que el profe tardó bastante en llegar y pasó la mitad de la clase. Tuvieron las demás clases, con pequeños descansos de diez minutos entre cada una. Y al sonar la campana que daba por cuncluídas las clases, recogieron todo y salieron rápidamente ya que Minghao le acababa de decir a Mei que ya estaba en el parking esperándoles.

-Ay mi amado, mi divino esposo, vino a por mí. -dijo Yoosung para fastidiar a la pelinegra-
-Sí, sí, lo que tú digas.
Ambos jóvenes, llegaron rápidamente a dónde se encontraba el hermano de la chica, quién estaba junto a Jun y Joshua que decidieron ir con él.
-Uh....tu hermano es mi esposo, pero Joshua.... -dijo Yoosung nada más ver al nombrado-
-¿Le vas a ser infiel a mi hermano con Joshua? No me esperaba eso de tí, por fin acepté tu relación con Hao y ahora le haces esto.

Mientras ambos discutían sobre la infidelidad del chico, los tres chicos de Seventeen que habían llegado, no paraban de reírse.
-¿Así que ya no me quieres? ¿Todos esos coqueteos eran una farsa? Nunca te importé. -dijo Minghao siendo dramático-
-No, hyung, no es lo que crees. Yo te amo.
-Ya, ya, en mi propia casa me engañas, ¿¡y encima con Joshua!? -exclamó llevándose la mano al pecho dramatizando más las cosas-