Capítulo 31 - Diosa-sama da miedo... ¡realmente da miedo!

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"¿!?"

Kanata se dio la vuelta en forma voluntaria.

En parte porque escuchó un estallido, como el estallido de un globo, y en parte porque su cerebro tenía una imaginación cruel que decía: "De ninguna manera".

"... Eh."

Sin embargo, contrariamente a las expectativas de Kanata, estaban vivos y bien.

No había nada extraño en ellos y, excepto por cómo se había detenido el tiempo, conservaban la forma de un ser humano, no diferente de Kanata.

"Dios mío, ¿pensaste que tal vez los mate?"

"... No."

"Estoy tan ofendida", se rió mientras se llamaba sí misma una diosa.

Kanata se preguntó si estaba mal por haber dudado de ella incluso por un momento, pero era natural que pensara en lo inesperado si le decían que ella los borraría por él.

Aunque nobles estudiantes no eran amigos sino estos enemigos de Kanata, él nunca extrañaría quitarles la vida, ni siquiera como una broma.

"No te preocupes. Incluso si los borro, puedo crear otros nuevos".

"... ¿Jaa?"

Y la Diosa siguió hablando frente a Kanata, quien estaba estupefacto.

"La existencia se puede crear y se puede borrar a mi voluntad. Incluso si el mundo es destruido, puedo recrear uno nuevo".

"..."

"Es una molestia volver a construirlo, pero estará bien después de eso".

Diosa... No, Kanata dudaba si realmente era una diosa.

Según la tradición del Reino, la Diosa es una mujer benévola. La iglesia a la que pertenece Alfana está dedicada a ella.

Se supone que una deidad es reconfortante para el corazón y el alma, una figura sagrada.

"... YO."

"¿Qué es?"

Mientras susurraba dulcemente, Kanata miró firmemente hacia adelante.

No importaba quién era ella; no podía estar de acuerdo con ella.

"No estoy de acuerdo. Ciertamente eres algo más que un ser humano... y ciertamente eres una existencia aterradora si puedes detener el tiempo de esta manera. Pero eso no significa que puedas simplemente recrearlo, ¿ves?"

"... ¿Eh?"

Ella se rió, divertida.

Ella lo miró directamente a los ojos, esperando las siguientes palabras.

Mientras percibía la pasión ligeramente peligrosa en sus ojos, Kanata giró sus palabras con firmeza.

"Hay mucha gente a la que no le gusto o piensa que soy un poco idiota. Sin embargo, no ser querido por todos también es una forma de vida, y la forma en que lo enfrentas es una forma de vida. Al menos, no creo que deba deshacerme de estos tipos solo porque no me gustan".

"No hay duda. Intentaste enfrentarlos a tu manera."

"Bueno, nueve de cada diez, va a ser más que una discusión", se rió Kanata.

"... aunque los que te rodean son bastante radicales".

"¿Eh?"

"No es nada. Ahora entiendo... eres ese tipo de persona."

Su comportamiento ligeramente aterrador había desaparecido y se acercó a Kanata con una sonrisa amable.

¿Qué está haciendo ella? Antes de que Kanata pudiera hablar, lo abrazaron y enterró la cara en la camiseta de Haishin-sama que cubría su amplio pecho.

La transmisión en otro mundo condujo a la creación masiva de YanderesWhere stories live. Discover now