❝ Imagínate despertar en tu serie favorita, seguro sería un sueño si no estuvieras luchando por tu vida a cada segundo dentro de ella. ❞
[en proceso.]
[Contiene spoilers de ambas temporadas.]
#1 Chishiya 21/01/23
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⋘ 𝑙𝑜𝑎𝑑𝑖𝑛𝑔 𝑑𝑎𝑡𝑎...⋙
[♟♟□□□□□□□□] 20%
And.. ¡begin!
Desperté con un dolor terrible de cabeza, resaca en su máximo esplendor. Mis manos apretaron con fuerza mis cabellos desordenados, y deseé esconderme entre las sábanas el resto del día, y pudo cumplirse, lo habría logrado si no escuchaba un "ejem" en la habitación.
Definitivamente pensé lo peor, me levanté de una sola y abrí mis ojos para acostumbrarme a la luz, mirando todo a mi alrededor hasta encontrarme con la figura de Kuina al borde de la cama.
— _____, no te quiero asustar, pero te ves horrible.
Solté un sonido de alivio al identificarla, dejándome caer dramáticamente sobre la cama de nuevo entre un llanto fingido, esta vez mientras los recuerdos de la noche anterior se encargaban de afligir aún más mi mente.
El alcohol en mi organismo había sido más de lo que hubiera consumido en mi vida, no era de ir a fiestas donde bebía, ni siquiera era de ir a fiestas comunes, así que era una experiencia nueva en un lugar indeseado.
Pudo haber sido un lugar deseado, lo hubiera sido si tal vez estuviera con Chishiya en una realidad donde no era tan indiferente y ahí si pudiera besuquearlo. Una realidad muy lejana, porque en esta realidad me había ignorado y en la otra realidad ni me topaba.
Fui sacada de mis pensamientos innecesarios acerca del desamor imaginario que tuve con Shuntarō cuando la otra chica en la habitación me descubrió de entre las mantas, tomando mi rostro en sus manos para jugar con mis mejillas y hacerme abrir los ojos de una vez por todas.
— Ya me tengo que ir, pero promete que no te quedarás así todo el día, ¿bien?— Asentí.— y tienes que ponerte decente, porque cuando te veas al espejo, bueno, el punto es que no creo que quieras salir así.
No estaba mirándola, pero estuve segura de que sonrió y salió de la habitación pocos minutos después, así que luego de muchísima fuerza de voluntad me levanté también.
Un mareo recorrió mi cuerpo, y no supe identificar si fue culpa del alcohol, de dormir tanto, o si incluso cambiando de mundo seguía siendo anémica.
Me dirigí al baño, preparándome mentalmente para verme al espejo.
Mmm, si pensamos objetivamente, así me veo casi de a diario cuando no salgo de casa.
Abrí la llave del agua, limpiando mi rostro un par de veces hasta que mi piel estuvo lo más limpia posible. Tenía un poco de maquillaje ajeno, besos en mis mejillas que habían sido dejados en algún momento con mis amistades de una noche. Mis cabellos estaban más enredados que nunca, y hasta se marcaban un poquito las bolsas debajo de mis ojos.
