SOLDIER OF THE SKY ~ Avatar's Fanfic

Ĉāpīṭŭłō ĉīŋčō

Abro mis ojos con lentitud, de alguna manera siento como si hubiera dormido por mucho tiempo, a medida que voy despertando siento como cada segundo tengo más energía. Miro a mi lado y veo dos personas con batas blancas y unas máscaras de plástico cubriendo sus rostros.

- Hola Alaia, es un gusto conocerte, es bueno que hayas despertado, te haremos una revisión para identificar que todo este bien, ¿de acuerdo?- miro al hombre sin entender por completo que es lo que está sucediendo, asiento y trato de sentarme en la camilla, apoyo mis manos sobre la colchoneta dura y me detengo al ver mi mano tan grande y de color azul- ya estas en tu cuerpo Na'vi, al igual que tus compañeros.

Trato de mirar cada detalle de mi cuerpo, soy muy grande, bajo las piernas de la camilla y acomodo mis pies en el suelo, se ven demasiado grandes, muevo mis dedos y no puedo evitar reír. La verdad esto me parece un poco divertido.

- Hola Alaia, soy la doctora Sam, vamos a hacer unos pequeños ejercicios para mirar si tu cuerpo reacciona bien, ¿de acuerdo?.

- Claro- comienzo a repetir los movimientos que ella hace con los dedos de sus manos, luego movemos las muñecas, y así consecutivamente hasta que ella finaliza los ejercicios y registra el resultado en una tablet.

- Muy bien, todo registra bien, solo, me preocupa su cabello- hago una mueca al oír lo último, llevo mi mano a la cabeza y tomo unos mechones y pequeñas trenzas, me sorprende ver el color, no me esperaba que fuera blanco- ¿Crees que deberíamos sacar un poco de sangre?, no quiero creer que el cuerpo alcanzó a infectarse.

- Es lo mejor, Alaia, vamos a sacar un poco de tu sangre, por favor estira tu brazo- asiento incomoda y estiro mi brazo, me muevo en la camilla al ver como la doctora se acerca con una jeringa bastante grande, esto no me agrada- será rápido.

Dirijo mi atención a la ventana en la habitación, respiro profundo al sentir el pellizco en mi brazo, por suerte sacan la sangre que necesitan y sacan la jeringa, la doctora me sonríe y limpia la sangre. Saca un parche de su bata y lo pega sobre la pequeña herida.

- Gracias- acaricio la zona de mi brazo y me centro en mirar con detenimiento la habitación en la que me encuentro, realmente no sé si es pequeña, o soy muy grande.

- Por favor sígueme, te llevare a que te cambies y te encuentres con tus compañeros- asiento y me levanto con cuidado, siento un pequeño hormigueo en mis piernas pero no es muy molesto, intento dar el primer paso pero solo logro tambalearme, sin quererlo siento como golpeo varias cosas tras de mi y las termino tirando al suelo- tranquila, solo es tu cola.

- ¿Cola?- intento mirar sobre mi espalda y veo una larga cola moverse de un lado a otro, río asombrada e intento moverla a mi gusto- esto es increíble.