magic in bed

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sus labios se encuentran con los otros en un furioso beso, sujeta con fuerza el pelo azabache del híbrido y lo deja en contra de las encimeras







──── ¡SOLTAME BOLUDO!










las manos del oso luchan tratando de empujarlo sin lograrlo porque cede a la necesidad del castaño en besarlo, es adictivo como sus lenguas se unen y siente como su labio inferior quema
al ser aprisionado por unos dientes
















────te he ayudado muchas veces oso de mierda devuélveme el favor












eso fue suficiente para que la burbuja sexual detone, se deja embriagar por las expertas manos del mayor que van hacia su trasero apretándolo, arquea su espalda al sentir los labios intrusos recorriendo le cada tramo del cuello














──── voy a follarte

──── ¿Ya ni me decís “corazon”?




















no recibió ni una respuesta porque el hechicero no tenía ganas de decirle cosas bonitas, quería verlo destruido y joderlo tanto hasta que no vuelva a querer tener sexo con nadie más, pasa sus dedos sobre la mejilla del híbrido y delinea la comisura de sus labios en donde sobre salen dos colmillos que son mucho más grandes que los de su ex esposa Rubí

























──── ponete sobre la mesa





















la voz de spreen se oía más grave y los rasgos de su parte animal tomaban control en él dejando ver sus garras, maniobró el cuerpo liviano de juan y lo empujó boca abajo contra la mesa de madera reteniendo lo, se acercó al oído y delineó su lóbulo

















──── escúchame boludo solo te voy a coger porque te debo una luego no quiero que te aparezcas en mi polleria





















destrozó toda la ropa inferior del de gafas y alzó sus caderas dejando le ver unas raspaduras en los muslos, un par de moretones y marcas de dientes que dejó la semana pasada jura que no fue intencional son sus instintos que le demandan marcar, con cuidado toma la mano izquierda del mas bajo y lo lleva a su parte baja dándole indicio de lo que debía de hacer por el





Juan entiende y agradece antes haber ensalivado su mano por lo que primero cierra los ojos y segundo mete el primer dedo, aprieta con fuerza la madera y mueve el dedo enloqueciendo al instante, una ráfaga de sensaciones invade su cuerpo cuando el segundo y tercero se unen tocando aquel punto tan sensible








spreen mira el desastre que se genera debajo suyo y cuando se ve satisfecho lo detiene ganándose una queja, lo agarra de las caderas y roza sus dientes en el lechoso hombro que mantiene aún una marca que consiste en dos huecos de tono rojizo
















──── ¡YA APURATE!

──── A MI NO ME VAS A GRITAR PELOTUDO





















embiste rudo demandando tener el control sobre el hechicero y no pierde el tiempo en seguir jodiendo lo, puede percibir demasiado cerca el olor de las feromonas del contrario y esos bajos gemidos que llenan la cocina






O1.










los ojos marrones derraman lágrimas, tiene unas líneas cayendo sobre sus labios hinchados y tiene la mente distorsionada de placer, recuerda tan bien como el oso le dijo que sería la última vez que tendrían este tipo de encuentros que ahora le parecería gracioso recordárselo pero no tiene en mente una pelea solo quiere seguir aferrándose al pelo azabache mientras es cogido






──── ¿spreen? ¿che estás ahí?







el oso paro, juan lo miro lleno de pánico y trato de alejarse de la situación tan comprometida pero vio esa sonrisa sinica en el híbrido y supo que si es que el intruso no entraba sería todo un milagro



los  labios de spreen están tan cerca a su oído que se estremece al oír la voz tan ronca, rasguña la espalda ajena y tiembla seguro de que pronto se vendría





──── me importa un–a pija si nos oyen

────estás loc– ¡SPREEN!









cerró los ojos y se aferró con todas sus fuerzas al híbrido mientras llegaba y se derramaba en la mesa de oficina, el contrario no dejo de darle placer hasta que también llegó y en cambio mordió el hombro



















hubo un rotundo silencio en su post orgasmo y si no hubiera sido por un tropezón detrás de la puerta de la oficina no hubieran recordado que tenían a alguien más fuera, luego por lo rápido que iba suponieron que se fue corriendo pero eso importaba una mierda ahora lo único que querían es quedarse un ratito más así











juan acaricio las mejillas del oso y le dejo cortos picos hasta descender a su cuello, oír los gemidos roncos era lo más gratificante para el castaño













──── mi turno oso de mierda

──── solo apúrate o te haré mierda otra vez


























NOTA.

Voy a confesar que estoy teniendo un bloqueo de escritora dwsde hace unos meses pero creo que estoy recuperando el ritmo

idk ¿Quedó bien? xd

M I E L „"Where stories live. Discover now