Reencarne como la melliza de Hermione Granger

de nuevo a la vida

Mi vida como un bebe es sencilla, pero me incomoda tener que beber del pecho materno, para la edad de mi mente es vergonzoso, pero es la única forma de comer por ahora. Por lo que veo los padres de Hermione, son muy buenas personas. Con la escasa información de los libros y las películas nunca tuvieron un desarrollo de personaje tan complejo como su hija. Mi madre quien se llama Jean Granger es una increíble persona, nos lee libros nos canta juega con nosotras y lo que veo de ella es que siempre consulta un libro cuando no entiende de algo sobre la maternidad. Mi padre quien se llama Thomas es un hombre sencillo, amable y cariñoso, él es un padre genial. Ojalá que en anterior vida mi padre hubiera sido como él. Estamos en la sala y mi padre está cargando a Hermione mientras mi madre me carga- escúchame bien Minnie, nada de novios y tú también Julie, nada de novios- mi madre suelta una gran carcajada- ¿que, no puedo proteger a mis niñas? - espérate a que lleguen a la adolescencia y conozcan a chicos- mi padre abre los ojos de par en par- ¡Eso nunca, no voy a permitir que unos babosos estén cerca de mis niñas! - aja -.
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Han pasado 4 años desde que reencarne. Hermione no se despega mi ni por un minuto, es tierno ya que somos mellizas- ¡Jules espérame! - Grita Hermione mientras yo subo las escaleras rápidamente con una planta en las manos- ¡Minnie, ven a ver esto! - digo desde la planta alta, ella sube rápidamente hasta nuestro cuarto- ¿qué paso? - pregunta con curiosidad- mira- digo mientras pongo la planta en el piso, es una planta totalmente marchita que a la vecina se le habia olvidado regar. Hacia bastante tiempo no regaba su jardín y tome dos de sus plantas al tocar la primera esta volvió a la vida como si nada, me lleve otra para tratar de hacer lo mismo y mostrarle a Hermione- ¡mira!- ¿una planta marchita?-  no, esto..- toque la planta y esta como la anterior volvió a la vida- woah- se nota que Minnie no tenía palabra alguna- ¿como lo hiciste?- no se solo la toque y volvió a vivir...- pues yo también puedo hacer algo -dijo mientras iba a el librero que teníamos en el cuarto, saco el libro Matilda, ese era su favorito. Lo abrió en una página aleatorea y cerró los ojos- ammm....¿que se supone que haces- ¡Shhh!, necesito concentrarme- dijo para cerrar los ojos con más fuerza derrepente el libro empezó a flotar- wow- yo también me quede sin habla. Si yo hago florecer las plantas marchitas eso significa que, ¡Voy a ingresar a Hogwarts!. Bien ese siempre a sido mi sueño desde que mi abuela, la única persona a la que siempre le importe me regalo la saga de Harry Potter en edición limitada, todavía recuerdo ese día. Era mi cumpleaños número 6 y como siempre todos lo años la atención se iba para Sasha, aborrecía compartir cumpleaños con ella, nunca me daban nada, ni felicitaciones, salvo mi abuela, mujer viuda, la única mujer con la que podría hacer de todo, ella me dio una gran caja en frente de todos los invitados, era muchísimo más grande que el castillo de princesas que le regalaron a Sasha, ella se puso histérica y le exigio gritando a mi abuela que le diera el regalo pero mi abuela la golpeó en la mejilla y luego reprendió a mis padres por mimarla tanto, me pidió que abriera mi regalo. Al abrirlo vi lo que era, un uniforme de Hogwarts de la casa de Slytherin con uniforme de quidditch, varita, la carta de aceptación de Hogwarts y los 7 libros, Harry Potter eran mis películas favoritas y que me regalara todo eso era increíble. Era lo único que ni mis hermano ni mis padre me podrían quitar. Con el tiempo mi abuela me regalaba todas las sagas de libros que me pudieran interesar. Era la mejor, no me imagino cuanto dolor a de sentir ya que morí.