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La alarma había sonado hace unos minutos y sus exhaustos compañeros ya se habían ido. Hiromi se mantenía en su lugar, intentando ganar tiempo antes de llegar a casa. Ya sabía lo que le esperaba.

Lo sucedido hace un rato solo era una advertencia.

Era de esperarse. No solo le había ganado a Neji, dejándolo malherido y perdiendo su máscara ante cualquiera, también había revelado su poder, del cual solo ella tenía conocimiento.

Estaba en serios problemas.

No tenía escapatoria.

Sus manos temblaban ligeramente mientras repasaba mentalmente todo lo sucedido. Incluso cómo se habían atrevido a interferir en su pelea, en la que confiaba plenamente. Las explosiones de Bakugo habian sido evitables por los puntos de energía que había drenado. Su victoria estaba asegurada, incluso si su movimiento especial la hubiera dañado.

Esta vez habían ido demasiado lejos.

Y ella también.

Dejó a Neji malherido. Si no fuera por la intervención de su madre, tal vez no habría despertado tan rápido.

La puerta de su aula fue tocada, y notó aquellos ojos perla mirándola.

Neji: —Podemos irnos juntos, si quieres —afirmó mientras se apoyaba en el marco de la puerta, con los botones de su camisa mal abotonados, revelando las vendas en su pecho.

Hiromi lo miró por un instante y luego fijó la vista al frente.

Hiromi: — No.

Neji: — ¿Te quedarás aquí hasta cuándo?... ¿No es mejor resolver las cosas ahora?...

Hiromi: — Siempre te resulta fácil hablar... Neji-sama... —bajó la mirada.

Neji: — No hiciste nada malo.

Hiromi: — Lo sé.

Neji: — Entonces, ¿por qué estás así? —preguntó confundido.

Hiromi: — ¿Sabes para qué mi rama usa las máscaras?...

Neji: — Para ocultarse... Supongo.

Hiromi: — No solo para ocultarnos, Neji-sama...

Neji: — ¿Entonces, para qué más? —se mantuvo apoyado en el marco de la puerta, visiblemente cansado.

Hiromi: — Hmm —miró al frente, sus ojos brillaron levemente—. Recuerdo... Hace unos años, un hombre de mi rama accidentalmente rompió su máscara... Él no quería salir de casa por esa razón, pero hubo una reunión del clan y se vio obligado a asistir... —miró a Neji— Fue castigado... Castigado por el simple hecho de no llevar su máscara... —volvió la vista al suelo— Solo los de la rama principal tienen el derecho de mostrarse, así es la jerarquía del clan... La máscara es un recordatorio de que somos meros parias para esa familia... Pero si lo pienso bien, también es nuestra protección... Siempre que la rama principal está molesta, se desquita con nosotros, como si fuéramos simples juguetes para ellos... No mostrar nuestros rostros, nuestras emociones, es una protección para evitar conflictos con ustedes, quienes se creen dueños de nuestras vidas...

El chico guardó silencio durante unos minutos, observando cómo Hiromi recogía sus cosas y guardaba en su mochila, mientras se dirigía hacia la salida donde él se encontraba.

Ambos cruzaron miradas y se estudiaron.

Hiromi: — Lo malo de no tener mi máscara ahora es que tendré que fingir que la tengo para no cometer una locura —sonrió levemente—. Adiós.

Al salir, se dio cuenta de que los dos amigos del chico estaban escuchando la conversación, apoyados en la pared. Hizo una reverencia y siguió caminando hacia la salida.

Hyuga. (OC X BNHA) EDITANDOTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon