🦋

263 22 5
                                    

En su calendario personal hay ciertos días amargos y dolorosos, marcados con un círculo en señal de su pena futura.

En esos días no hay palabras, más que suspiros y un vacío incómodo en su pecho. Sostiene por horas su corazón, susurra cosas delante de un altar exquisitamente decorado y después, solo continúa con su vida.

Así ha sido por los últimos 20 años, desde que su querida hermana falleció.

El dolor no se ha desvanecido de su corazón, aunque es más débil, es algo de lo que aprendió a llevar en lo profundo de su alma después de años de terapia y la inminente realidad.
Pero pese a todo ese panorama gris, en estos últimos 20 años ha podido disfrutar de dos seres maravillosos.

Sus sobrinos.

Ambos con la viva imagen de su madre en sus ojos, adora mirarlos reír y disfrutar. Si pudiera decir algo a su hermana, es que, los cuido lo mejor que ha podido y son felices.

...

En el día de hoy, es uno de esos días con un círculo rojo en su calendario.
Suele ser un día íntimo pese a la preocupación de su pareja, disfruta de comprar un bello detalle y un pastelillo que ofrece a su hermana.

Luego invita a sus sobrinos, le da el regalo a Kyn y come el pastel junto con el sensible Kai.
Hay palabras e historias que disfruta compartir sobre su hermana con sus sobrinos, siempre hay detalles que relucen entre más piensa sobre su hermana.

El pastel de chocolate con una vela, su pequeño fuego ilumina el rostro de su hermana y reza en silencio.
Detrás de ella, sus sobrinos que rezan igualmente.

(Cuentan sus últimas noticias sobre su vida a su madre.)

Cuando los tres han terminado, se miran en silencio y toman el pastel para ir a la mesa.

Kikyo tiene un cuchillo en las manos y parte el pastel, reparte rebanadas entre ambos gemelos y después se sienta delante de ellos.

-Ha sido otro año de bendición.- comenta con una sonrisa, lleva el pastel a su boca y degusta el sabor del chocolate.

-Tía, ¿crees que madre escuche esto?- comenta Kai, rasca su mejilla algo ansioso y mira hacia otro lado.

Kyn parece algo molesta por ello, infla las mejillas y pellizca la mejilla de su hermano con suma molestia.
Kikyo ríe dulcemente, le recuerda a su fresca juventud.

-¡¿Cómo te atreves a dudarlo?!- un golpe a la mesa- ¡Claro que mamá observa! ¡Mamá siempre está aquí en el corazón!-

Kai luce intimidado por el carácter y gritos de su hermana, pero una mano da palmaditas en su espalda para consolarlo.

-Jamás dudes que ella te escuche, seguramente es un espíritu travieso incluso en el más allá.- la cara de Kikyo se mantiene serio, pero lo suficiente amable para calmar el ansía de Kai.
-Les he dicho que a su madre nada le detenía, y no creo que la muerte sea una atadura tan limitante a lo que conocemos.-

-¡Eso! ¡Tía sabe lo que dice!- sus gritos no han disminuido de volumen.

-Por ejemplo.
En la mañana estaba un poco triste, pero una mariposa azul se acercó a mi ventana... Mi esposo me lo dijo.-

-¿Y qué hizo la mariposa?- susurra Kai con temor a más gritos de su hermana.

-¿Qué hizo?, bueno, casi pude escuchar un susurro dulce; "estoy aquí, tonta".

¿No sería típico de su madre?, así que nunca duden.- alza sus manos e invita que Kyn tome lugar en su asiento y deje de golpear la mesa o la romperá.

Kyn parece satisfecha con la respuesta y Kai mira hacia la ventana, una mariposa azul está posada sobre una maceta dejando que sus alas reposen y se muevan débilmente con el viento.

Saluda tímidamente hacia ella, espera una contestación o susurro, pero no hay nada.

Kyn mira hacia la dirección de su hermano, su corazón se estremece y revuelve los cabellos de su hermano para distraerlo.

-¿Escuchaste su susurro?-

-¿Eh?- la cara de Kai expresa su confusión, sus ojos tiemblan y se concentra sobre la mariposa.

-No, tonto.
Jamás vas a escuchar por los oídos, se oyen en el corazón.- toco el pecho de su hermano y volteo para seguir comiendo un poco más de pastel.

¿Por el corazón?
Kai toca su pecho y cierra sus ojos, incluso en estas fechas... Su tía y su padre no se muestran tan tristes, ellos sonríen y charlan con su madre.

Ahí esta.
Escucha el susurro cálido, una caricia suave del viento y del sol.
Se siente un calor que inunda su cuerpo y entonces, la mariposa ya se ha ido hacia el cielo.

...

Cualquier comentario, voto o sugerencia se agradece.

Atte: RINNIHIGURASHI.

Un agradecimiento a ValeriaBolaos747 por la idea.
Y gracias a todos los que se toman el tiempo de leer.

Posiblemente actualice otros dos capítulos.

Pronto nace un bebe (Inuyasha y Kagome)Where stories live. Discover now