𝐈𝐧𝐞𝐯𝐢𝐭𝐚𝐛𝐥𝐞 𝐃𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨 ☆(Duff McKagan)☆

☆Capítulo 13☆

Nuestro Tatuaje

Pasó una semana desde que Duff me pidió ser su novia de la forma más hermosa que pude haber imaginado. Fue muy romántico e inesperado. Fue hermoso. Jamás hubiese imaginado que el rubio tenía esa parte tan romántica.

Desde que somos oficialmente novios, nos mostramos mucho más apegados de lo que nos mostrábamos en público. Los chicos y las chicas ya lo saben, aunque las chicas aún me advierten que tenga cuidado ya que, después de todo estábamos hablando de Duff Mckagan, llegaría un momento en el que no hubiera mujer que no quiera acostarse con él.

Cuando les conté a las chicas se emocionaron mucho aunque dijeron que era algo que iba a pasar tarde o temprano.
En cambio, Duff no quiso contarme que reacción tuvieron los chicos de su banda. En fin.
Hoy me veré con el rubio teñido, ambos terminamos de ensayar a la misma hora y decidimos ir por un helado ya que estaba empezando a hacer calor.

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—¡Ya basta Duff!, ¡No aguanto más!—
Supliqué para que dejara de hacerme cosquillas. En poco tiempo conoció mi punto débil para las cosquillas. El rubio siguió hasta que no aguante más y me acosté en el pasto, con la esperanza de evadir sus cosquillas. El paro y se recostó a mi lado también. Habíamos terminado el helado y me había llevado al parque.
Ya estaba atardeciendo.

—Duff.

—Dime.

—Quiero hacerme un tatuaje.

—¿Uno más del montón que tienes?—Me reí y le golpeé suavemente el brazo.

—No son muchos, son solo tres.

—Recuerdame en donde los tienes.

—Tengo una mariposa en la parte baja de la espalda, una guitarra eléctrica en las costillas, y una pequeña rosa en la nuca.—En sí, ni siquiera sabía que tenía esos tres tatuajes, me enteré cuando me bañe por primera vez con este cuerpo en esta época. Al parecer a Marilyn si le gustaban los tatuajes. En cambio yo, en mi época no tenía ningún tatuaje, aunque pensé en hacerme uno muchas veces.

—Y porqué me dices que quieres otro tatuaje entonces.

—Porque quiero hacerme un tatuaje contigo—Dije apoyándome en su pecho. Él paso su mano por mi cintura.

—¿Estas segura?, ¿y que si algún día terminamos y quedas con el tatuaje?

—Hagámonos algo que solo nos represente a nosotros. No letras ni nombres.

—Algo que nos represente...¿que tal una rosa?

—Las rosas representan a tu banda Duff.

—Cierto—dijo y se quedó pensando al igual que yo. Hasta que se me ocurrió la idea perfecta.

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Ya nos estaban tatuando. Le dije la idea a Duff y estuvo de acuerdo.
La verdad, pensé que me iba a doler mas. Pero el dolor es bastante aguantable.

—Listo niña, fíjate en el espejo.—me dijo el tatuador, a Duff aun lo estaban tatuando. Me fijé en el espejo y era justo lo que quería.
En la parte trasera del brazo, me tatue una luna cuarto creciente, con el hilo rojo atado a ella.

A mi se me ocurrió la idea de la luna, pero Duff dijo que le agregaremos el hilo rojo. Me pareció muy tierno de su parte.

Cuando menos me di cuenta, a Duff ya le habían terminado el tatuaje.
Les pagamos a los tatuadores y nos fuimos de allí.

—Gracias Duff.

—¿Porque me das las gracias linda?

—Por hacer esta locura conmigo—dije y le sonreí, mirandolo a los ojos. Amaba que el me mirara directo a los ojos porque, podía sentir que de esa forma, ambos éramos honestos con lo que decíamos.

—Contigo estrellita, iría hasta el mismísimo desierto—dijo para luego darme un beso en los labios.

—Oh y mira—dijo de repente para mostrarme el costado de su muñeca. Tenia una estrella tatuada con una 'M' dentro de ella. No era muy grande pero era muy visible.

—¿Qué es esto?—pregunté, pero pude imaginarme la respuesta.

—Me tatue una estrella con tu inicial. Porque tu eres esa estrella que me ilumino una noche, Marilyn. Eres mi estrellita— se me agüaron los ojos. Fue lo más lindo que pudo haberme dicho alguien. Lo bese, lo besé mucho. En sus labios y por toda la cara. No podía creer que se haya tatuado mi inicial, ni siquiera lo sabía.

—¿Pero en que momento?—dije limpiandome las lágrimas de mis ojos.

—¿No te parecía raro que siendo a mí al primero que empezaron a tatuar, hayan tardado tanto?— y es cierto. Con mi tatuaje empezaron unos minutos después y sin embargo terminé antes que él.

—Es la sorpresa más hermosa que alguien pudo haberme dado, gracias Duff. Te amo—es la primera vez que entre nosotros utilizamos esa palabra. 'Te amo', para mi esa frase de verdad tenía significado. No me sentía lista de decirle eso ya que no lo conocía muy bien, pero este tatuaje fue una verdadera prueba a ojos cerrados.

—Yo también te amo Lyn—dijo para tomar mi rostro y besarme.
Después de pasear unas horas más, me acompaño hasta mi casa, cabe aclarar que andábamos caminando, ya que no le había pedido prestado el auto a su amigo. Pero creo que caminar con el era mucho las hermoso que cuando íbamos en auto.
Lo despedí con un beso y se marcho.

Cuando entré a mi casa, Lucy estaba con un lápiz y un cuaderno, sentada en el sofá.  Supuse que estaba escribiendo una nueva canción, asique me senté al lado de ella. Me delataba sola, no podia ocultar mi felicidad.

—¿Qué tienes?—le pregunté sonriente, respecto a la canción.

—Una nueva canción. También he estado pensando en un ritmo clave que quiero que tenga. ¿Y tú? ¿Que tienes?.

—Esto—dije y le mostré el tatuaje. Ella abrió mucho la boca, sorprendida. Le conté todo, desde mi idea inicial hasta la sorpresa de que Duff me había dado.

—¿Encerio el idiota hizo eso?, wow jamas creí que llegara a tal nivel. Quiero decir, es muy diferente ahora a como es de famoso.

—Lo sé, también supuse lo mismo. Espero que jamás cambie. A este punto voy a caer perdidamente enamorada de él.—dije apoyándome en el hombro de Lucy. Ella cruzó su brazo al rededor mío.

—Linda, si sabes que en algún momento tenemos que volver ¿no?

—Lo sé. Al menos, déjame disfrutar mientras estemos aquí.
No quería volver al siglo XXI. Quería quedarme aquí, en los 80s con las chicas, con Duff. Era una fantasía hecha realidad.
Pero como dijo Lucy, tarde o temprano tendríamos que hacerlo, no sé como, pero pasaría.