OO1. ¿Quién es el padre?

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Pablo Gavira no era un llorón.

Era muchas cosas: lengua afilada, busca pleito, de poca paciencia, orgulloso, hermoso, valiente, ambicioso, malhablado, impulsivo, pero débil definitivamente no era una de ellas.

Si algo le había dejado su educación era que no servía de nada demostrar al extremo sus emociones, era mejor pasar el dolor en silencio. Llorar era una pérdida de tiempo.

Desde muy pequeño supo que si quería algo tenía que levantarse y hacerlo él mismo.

No lloró cuando a los 11 años en La Masía se cayó y raspó todas sus piernas, no lloró cuando su madre pasó horas gritándole. No lloró cuando se presentó como omega aun sabiendo las complicaciones que vienen con eso. No lloró cuando su hermana hacía maletas para marcharse de la casa, a pesar de que él suplicaba que no lo hiciera. No lloró cuando la vio yéndose a escondidas en medio de la noche para no volver.

Pero esta vez, Pablo se permitió llorar. Lloraba porque su joven carrera en el futbol se iba a ir a la mierda. Él lloraba por el niño que tenía dentro de él. Lloraba porque terminó siendo una puta como había dicho su padre.

Pablo Martín Páez Gavira lloró.

Abortarlo era una de sus opciones, pero Gavi sabía, en el fondo de él, que en realidad no quería eso.

Sintió la calidez de una mano en su hombro. Gavi quería apartarla y hacerse una bolita, cerrar los ojos y fingir que no estaba sucediendo, pero sabía que no era así como funcionaba la vida. Lo aprendió a las malas. Lo iba a tener que afrontar de una forma u otra.

—Gavi— dijo suavemente el médico y miró a Gavi con lástima en sus ojos. Gavi odiaba la compasión. La odiaba más que nada—, ¿Estás bien?

El chico no pudo responder ¿Estaba bien? No, en definitiva, no. Él recién había jugado en un mundial con 18 años. Tenía toda una carrera por delante. Él era tan joven. Sus padres lo odiarían cuando se enteraran, o tal vez lo matarían primero. Gavi no estaba preparado para ser madre. Apenas podía evitar perder la cordura por completo.

—Pablo— lo llamó esta vez Xavi con voz firme, pero con algo de preocupación en ella—, por favor dime quién es el padre.

Gavi apretó los ojos. El padre. El padre alfa. Su hijo tenía un padre alfa. Gavi había preferido ignorar el hecho de que se acostó con su mejor amigo, ambos estaban demasiado ebrios para pensar con claridad. Su mejor amigo de 20 años que también tenía un gran futuro por delante, ahora tenía que decirle que iba a ser padre.

—¿Quién es, Gavi? — volvió a indagar Xavi acercándose con cuidado al omega.

Pablo tragó con dificultad, temiendo que vomitaría.

—P-Pedri.

***

Pedri ya estaba teniendo un mal día antes de que Xavi lo llamara.

Se levantó tarde para ir al entrenamiento, se había cortado el agua caliente en su departamento y cuando llegó a entrenar discutió con Ferrán por una cuestión sin importancia. Además, la noche anterior no se dejaba de repetir en su cabeza. Ver a Alicia Messi besuqueándose con Agustín Giay fue la gota que derramó el vaso.

Había hecho todo para que la omega le prestara atención. Pedri podía ser un amargado insufrible, no lo negaba. Pero también tenía aspectos agradables en su personalidad ¿Qué tenía Giay?

Ferran lo había llevado por unos tragos la noche anterior para "sanar" un corazón roto. Debería haber presentido que terminaría ebrio.

Estaba siguiendo a Xavi hasta la enfermería. Le había preguntado qué sucedía cuando lo fue a buscar a los vestidores, pero solo obtuvo una mira enojada.

Antes de que Pedri se diera cuenta estaban en la enfermería. Entró detrás de Xavi. El corazón de Pedri se comenzó a acelerar al ver a Gavi acurrucado durmiendo, estaba abrazando una almohada como si su vida dependiera de eso.

Gavi se había desmayado en el entrenamiento unas horas antes. Pedri estaba en efecto preocupado por su mejor amigo, aunque con el evidente olor de alfa enojado que desprendía Xavi cuando lo llamó lo hizo preocuparse más por su propia vida.

La noche en la que se acostaron se presentó en su mente de repente. Recordó que el omega olía particularmente bien esa noche, tal vez eran los tragos que Pedri tenía encima. Esa noche podía bajarle la luna y las estrellas a Pablo si se lo pedía. Se había olvidado por completo de Alicia Messi esa noche. Había pasado un mes y medio desde eso.

Pero luego, la mañana siguiente, Gavi le había dejado en claro que todo había sido un error y que no tenían porqué hablar del tema, Pedri solo aceptó la decisión de su mejor amigo.

Pedri se acercó lentamente a el omega y acarició suavemente su cabello, se percató de que el aroma a vainilla de Gavi era mucho más dulce. Así olía ese día.

—¿Sabes por qué estás aquí? — preguntó el médico beta apareciendo de la nada.

—¿Por qué es mi mejor amigo? — Pedri quería afirmarlo, pero le salió como una pregunta. No tenía idea de porqué lo llamaron a él en específico o porqué Xavi estaba tan enojado y al parecer era en su contra.

—Sr. González— el médico habló con lentitud como si se estuviera asegurando de que Pedri entendiera perfectamente—, el Sr. Gavira se desmayó en el entrenamiento, pero eso usted lo sabe. La cosa es que el Sr. Gavira afirmo haber experimentado náuseas y vómitos— el médico hizo una pausa—. Recientemente se descubrió que...

—Que embarazaste a MI CACHORRO, idiota— Xavi interrumpió al médico alzando la voz. Tomó a Pedri del hombro, lo alejó de Gavi para poder propinarle un golpe a puño cerrado en la quijada.

Al caer al suelo el menor ni siquiera tuvo tiempo de enojarse y devolver el puñetazo. Se sintió peor el golpe mental que el físico, sintió que su mundo se salía de su eje. Gavi estaba embarazado luego de un mes y medio de haber tenido relaciones sexuales con él. Se habían olvidado por completo de usar protección y no le cuestionó en ningún momento al menor si había tomado algún anticonceptivo.

Mierda, Gavi estaba esperando a su hijo.




───── ❝ Lyra habla ❞ ─────

Holaa, se que debería actualizar las historias en vez de publicar más, pero tenía esta en borrador hace tiempo y la quería subir. Está inspirada en una historia de James Potter llamada "Hurricaine".

I like me better ❘ Pedri × GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora