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—Yo creo que voy a llorar...
— vos pensa que es por una buena causa — contestó Sofía.
Argentina es campeón del mundo, y con ello, es hora de cumplir todas las promesas que se juraron cumplir los Argentinos.
Las dos amigas habían prometido hacerse un cambió de look por el mundial así que ahí estaban en la peluquería para que luego Sofía le haga un tatuaje a su amiga.
Romina vió a la, ahora, colorada haciéndole un puchero.
—¿hasta dónde?— preguntó la mujer y Romina puso sus mano justo arriba de sus hombros suspirando.
La señora le hizo una colita un poco más abajo de donde le cortaría el pelo ya que la de hebras negras donaría todo su pelo.
Sofía se tapó la boca viendo cómo el pelo de su amiga ya no llegaba debajo de su cintura como antes mientras que Romina mantenía los ojos cerrados.
Al finalizar luego de algunos retoques la peluquera sentó a su clienta frente al espejo dejando que está habrá los ojos.
—no puedo creerlo...
—Estas preciosa Romi — su amiga sonrió, sin duda se veía hermosa.
♡
Sus manos temblaron abriendo la puerta con su llave de la casa que compartía con su pareja.
Suspiró cerrando la puerta detrás de ella buscando con la mirada al futbolistas —¡Enzo! Amor ¿Estás en casa?
—¡En la cocina!
A pasos lentos caminó hasta donde se encontraba su novio de espalda cocinando.
Al sentir la presencia de su pareja, Enzo volteo para mirar a su novia.
Su mirada se dirigió hacia su pelo abriendo su boca para luego sonreír — ¡Que hermosa!
