🎙️── ❝𝑺𝑰𝑬𝑴𝑷𝑹𝑬 𝑬𝑺𝑻𝑼𝑽𝑬 𝑨𝑸𝑼í, 𝑭𝑼𝑰𝑺𝑻𝑬 𝑻ú 𝑸𝑼𝑰𝑬𝑵 𝑽𝑰𝑵𝑶 𝑨 𝑴í❞
"En el mundo en el que que estaba solo, ahí estabas tú... Isagi."
🌧⇄Para él, la música era mucho más que estribillos erráticos y sinfonías desordenadas, para...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
—Yoi, ¿estas despierto?
Bachira dirigió su vista hacia adelante, encontrándose con el cristal de la ventana, empapada, no encontraba la forma de la ciudad, solo distorsionadas imágenes y las luces vibrantes de los edificios; como flashes difuminados. Estaba lloviendo.
El podía reconocer algunos sonidos, demasiado ruidosos para su tranquilidad; estaban los truenos retumbantes, los autos esparciendo el agua acumulada y el murmullo de la ciudad, era caótico.
—¿Me oyes? Meguru llamando a Yoichi –Sacudió un tanto su cuerpo, esperando una respuesta afirmativa o un murmullo cansado.
—¿Bachi? —Isagi bostezó, aferrándose a la almohada. —¿Qué ocurre?
—¿Ah, te desperté? —Ligeramente se dejó caer en la cama que compartían, mirando el perfil de su pareja.
—Sí..., ya no importa. —Enrollo la sábana, y la deslizó por lo bajo de su hombro. —¿Qué pasó?
Isagi palpó sus párpados, tratando de disminuir el sueño de su rostro.
—Está lloviendo. — observó una vez más el cristal, y lo señalo esperando a captar su atención; después de un momento le devolvió la mirada a Isagi, pensativo, crédulo, encantado por su imaginación curiosa.
Isagi terminó por dar vuelta, de la misma forma que Bachira, encontrándose con sus ojos, tan pensativos y hermosos, lo encantador del ámbar y esos destellos profundos, mirándolo tan atentamente, buscando una respuesta en sus expresiones; ellos brillaron profundamente al sonreír.
Isagi amaba a verlo sonreír, amaba tanto ver esa curva cálida en su rostro, expresando amor, felicidad, cariño.
Teniendo esa sonrisa a su lado cada que despertaba, él ya se sentía el campeón del mundo.
Bachira es el trofeo más valioso de Isagi.
—Lo sé, es precioso.
—¡Es hermoso, Yoi!
—Como tú. —Susurró, sosteniendo la mano de su pareja, acariciando su tacto, y la acerco hasta su pecho; permitiéndole sentir el latido de su corazón; relajado, tranquilo, impaciente.
Tenían la sensación de tenerlo todo.
Una sensación temblorosa en el vientre, que les causaba un cosquilleo profundo expresando el revuelto de emociones.