ᴏɴᴇ sʜᴏᴛ - ғᴜᴛʙᴏʟɪsᴛᴀ -

ᵃⁿᵗᵒⁱⁿᵉ ᵍʳⁱᵉᶻᵐᵃⁿⁿ

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Estas últimas noches Antoine llegaba tarde a casa, oliendo alcohol, ebrio, echó un completo desastre.

Él ya no era el mismo, desde el día en que nos comprometimos pensé que todo cambiaría y seria mucho mejor, pero me equivoque.

Y ahí estaba yo de boba otra vez esperando a su llegada, con la comida lista para solo ser servida, apesar de la hora, yo siempre lo esperaré.

Agarre el móvil para ver la hora, las 10:26 p.m. me tumbé en el sillón y prendí el televisor.

"Tal vez el tráfico te cogio Antoine"

Dos de la maña, la manija de la puerta hizo que despertara del profundo sueño que había tenido, la puerta se abrió dejándome ver a Antoine, sus pasos eran torpes y bruscos, me levanté rápidamente para ir en busca de él, olía a perfume de mujer, su camisa estaba desabrochada y en el cuello de esta marcas de labial tenía.

— Estoy bien, deja de inspeccionarme —soltó molesto.

— Lo siento estaba preocupada —cerre la puerta— Esta es la tercera vez que llegas tarde en esta semana.

Ya estaba cansada de su comportamiento, sus ofensas y mentiras, al parecer las visitas con su amante eran constantes, pues habían veces que ni llegaba a dormir en casa.

— Ya me andas tomando el tiempo —apartó mi mano de su cuerpo— Esta es mi casa...

— Eso no quiere decir que por eso tienes el derecho de llegar a estas horas —reproche— Son las dos de la mañana Antoine.

— Ya no quiero discutir contigo —dejo un beso en mi cabeza— Me iré a dormir estoy muy cansado.

Subió a la habitación, apagué todas las luces de la sala y repetí su acción, al llegar al cuarto que compartíamos los dos, camine hasta la cama recostandome en la parte vacía de esta.

Sentía impotencia por el echo de no poder acabar con todo esto, no entendía porque Antonie mando siete años de relación a la basura, todo el amor que me decia tener creo que ya se acabó.