Camille Potter era la hermana melliza de Harry Potter. Es una chica bastante bromista al igual que su padre, James Potter, en especial si las bromas eran para los Slytherin.
¿Su vida? Jamás había sido normal, menos con la llegada de los hermanos Rid...
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Joder
Camille se levanta de la cama cubriéndose con las sábanas, aunque era en vano ya que Tom la había visto como fue traída al mundo. Mil cosas pasaban por la cabeza de la pelirroja, las cuales no sabría explicar con palabras, lo único que pensaba...
Me acosté con Tom Riddle.
-¿Ya te vas?- cuestiona Tom sentándose en la cama.- No, ya entendí que sucede, estás en la etapa de... Fue un error.- dice con burla.
-Tengo que bajar, se supone que soy la anfitriona.- dice ignorando lo anterior, porque una parte de ella sabía que no había sido un error.
-Claro.- murmura Tom viendo como luchaba por subirse en zipper del vestido, por lo que se acercó y se lo subió.
-Si necesitas darte un baño, allí esta la ducha.- comenta Camille sin darle la cara.- Iré asegurarme que nadie suba.
La Potter sale de la habitación exhalando todo el aire que tenía retenido en sus pulmones, se sentía idiota al salir de esa habitación sin aclarar lo que paso, pero no quería hacerse ilusiones.
Negó con la cabeza quitando la absurda idea de su mente, necesitaba olvidar lo que había pasado, al menos por unos momentos.
-Camille, ¿Estas bien?- cuestiona Ginny al verla bajar.
-Amm si, si, si.
-¿Segura? Es que Hermione me dijo que habías subido, pero no bajabas.- comenta preocupada.
-Si, es solo que me dolía un poco la cabeza, y me recoste.- responde sin importancia.- Te veo después.
Camille deja a Ginny y camina rápidamente a donde estaba George con una chica en sus piernas.
-Dame algo para olvidar.- le dice Camille haciendo que George la viera.
-¿Para olvidar? ¿Estas segura?- cuestiona.
-Si, para olvidar.
-Tengo algo aquí. pero es fuer...
Camille se lo quitó, dándose cuenta que era un polvo blanco ni se molestó en preguntar que era; echo un poco en la mesa haciendo una línea y inhalo con toda sus fuerzas. Pasaron unos minutos y tomó unas pastillas donde las había dejado los gemelos, se fue a una esquina de la sala para tomar una, con eso seguramente acabaría por los suelos.
Estaba sacándola de la bolsa cuando notó que alguien le soplaba en el oído y eso hizo que se girara de golpe.
-Joder...- murmuró.- ¿Que quieres?
-¿Qué tal si la compartimos?- preguntó con una sonrisa.
Camille lo miró unos segundos pero antes de responder, Matheo le quitó la pastilla que tenía en la mano y abrió su boca sacando un poco la lengua y puso la pastilla sobre su lengua mientras se la enseñaba.
