La Emperatriz Tonta

Capitulo 2

Un Molesto No Invitado

Cuando Shi Yun despertó solo tenia un pensamiento

Se arrepentía de toto

Siempre que bebía en exceso prometía no volver a probar una gota de licor en su vida, promesa que nunca cumplía.

Le dolía la cabeza, tenia la garganta seca y no quería moverse en absoluto sus ojos estaban firmemente cerrados y no planeaba abrirlos por un buen tiempo.

Por el tacto a su alrededor se encontraba en el suelo de algún lugar acostada boca arriba con las manos en los costados.

Shi Yun quería golpearse a ella misma. Tenia la intención de llegar a esta ciudad y vivir sin llamar la atención pero llegó la primera noche y anuncio su presencia. 

empezó a pensar en lo que hacer a continuación, buen, apenas ayer llegó no la encontrarían te pronto ¿verdad?   

como Shi Yun reflexionaba no se dio cuenta de que no estaba sola.

No fue hasta que la otra persona hablo que se percató 

—Cuanto tiempo—la persona que hablo tenia una voz calmada, tanto que parecía llevar pereza.

Al oír aquella voz, el dolor de cabeza de Shi Yun aumentó una punzada e inconscientemente frunció el entrecejo.

No dijo nada, lo único que hizo fue abrir los ojos. Lo único que pudo ver desde su ángulo de visión fue una ventana donde entraba luz del sol y un techo de madera muy bajo.

—Puedo decir que mi gusto por las personas no es tan... exótico

Shi Yun soltó una risa seca talvez lo que dijo en la noche no sea tan malo 

—Su majestad, perdone los inconvenientes que le e causado—en cualquier otra persona esa línea podría sonar respetuosa, pero dicha por Shi Yun sonaba cargada de ironía y sarcasmo

A pesar de sus respetuosas palabras Shi Yun no se había movido de la posición en la que desperto.

La otra persona no respondió y ambos se quedaron en silencio por un largo tiempo.

A Shi Yun le dolía la cabeza cada vez. No podía creer que un día  después de su llegada la encontrarían, la respiración calmada de la otra persona su voz y persona perezosa incluso su sola presencia la irritaba.

Cuando viajaba, cada vez que oía mencionar al emperador de Hou se le retorcía el estomago aunque la sensación había disminuido al pasar el tiempo encontrarse cara a cara en el mismo la molestaba mas de lo hubiera imaginado.

Oír el silencio y la respiración de el emperador la estaba molestando cada vez mas.

Llego un momento cuando su irritación llego a su punto máximo, tanteo a su alrededor y agarro lo primero que encontró que para desgracia del emperador fue una jarra de licor vacía y la lanzo en dirección de donde provenía la voz,

El emperador originalmente estaba sentado en una silla no muy lejos de Shi Yun, pero al ver la botella ir directamente en su dirección en un parpadeo se encontraba junto a la ventana,

La jarra se estrello en la silla y se rompió en pedazos.

Shi Yun al ver que no logro su objetivo se enojo aun mas y grito

 —¡Si no tienes nada que decir, vete! ¡lárgate!

Ver al hombre frete a ella, su bonito rostro, sus ojos y túnicas oscuras y lo sereno que se mantenía hizo que Shi Yun recogiera otra jarra, pero cuando levanto los ojos el hombre había desaparecido.

Aun enojada con la jarra en la mano la lanzo al azar y hubo otro estallido.

Shi Yun se arreglo la túnica compuso su cabello y salió de aquella habitación murmurando 

—Necesito golpear a alguien