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¿Estás ahí maldita perra? Dime que ahora sí estás cortando la vena correcta pedazo de mierda-. Reclamaba molesta fuera de los baños.
Quizás lo raro no era su molestia, lo peor era que no mentía, tenía ambas mangas arriba mientras su brazos sangraban, odiaba el como se sentía que todos miren tus brazos y lean tu historia sin conocerte, seguia fumando el cigarrillo mientras la ceniza caía entre sus piernas, pero esto no le molestaba, si bien todos ven la autolesion como algo enfermo y doloroso, no era así para ella
Para Amy, era una forma de liberar sus 'demonios' como ella los llamaba, sentía algún tipo de satisfacción a hacerlo aunque de igual forma, un tipo de castigo que su propia mente creo cómo escape de su terrible vida
Y no era suficiente con soportarse así misma, pues sufría acoso escolar, Rita Jenks la sobrina de el director era una completa perra, siempre buscaba con que molestarla, ¿pero que podría hacer?
Nadie puede salvarnos de nuestro propio destino, ni siquiera cuando es algo con lo que vamos a perecer
𖥠
Al terminar su clase de Filosofía, a la mierda la maldita filosofía, pensaba está, terminó por salir un rato a los alrededores del campus, solía haber bancas abandonadas detrás de las canchas, solo quería un poco de paz y no la conseguiría si había tanto ruido
Al llegar, un ruido llamó su atención, era cómo sí, alguien estuviera peleando sin dudarlo Miró detrás de la maleza, viendo cómo Jacob, coach de el equipo de fútbol americano le gritaba a otra persona, desconocía el núcleo de la pelea, pero sin duda le recordó todo lo que ella pasaba
Mierda-. Se alejó al ver que estos venían
Le dió curiosidad, sintió que ya lo había visto antes, así que decidió acercarse
Hey, hola, escuche todo y espero estes bien-. Mencionó apenada por la situación.
Aquel chico de bellos rubios volteó su rostro hacia ella, su rostro estaba serio y húmedo, estaba llorando como un bebé
¿Me estas acosando? -. Este soltó sin más
Qué?, No! No te estoy acosando-.
Este simplemente se río de ella dejandola confundida
Soy Tate, ¿Quieres juntarte?-.
Tate, Tate, Tate..
Era increíble como en tan poco tiempo se habían entendido tan bien, suponiendo que era muy similares e incluso pasaban por la misma mierda, lograron hacerse buenos amigos, pero era claro que todo se acomodaria para que estos se enamoraran
Pero todo cambió, cuando Tate se enteró que Amy iba a ser internada en un manicomio al terminar el semestre, pues su último intento de suicidio si fue grave y casí fatal.
...
Esa mañana de un Jueves, la mayoría de chicos estaban en la biblioteca, estudiando para su último exámen, incluyendo a Amy, quien leía y leía
El estruendo de un arma de fuego les hizo darse cuenta que no estaban a salvo, sus métodos de supervivencia no sirvieron de mucho, pues este ya estaba dentro de la biblioteca
La primera detonación, hicieron que Amy temblará de miedo, dos, tres... Cuatro, cinco detonaciónes bastaron para llegar a Amy, miro hacia su probable agresor... Tate?
La levanto fuertemente del brazo llevándola lejos, no quería pero la impresión la hizo gritar y llorar de miedo, claro era Tate, pero en ese momento no parecía
La llevó a uno de los salones en los que no había servicio, tiró el arma y esta corrió hasta el escritorio
Tate... ¿Porque lo hiciste?-. Este se limitaba a contestar simplemente avanzaba hacia ella
Estoy cansado, de todo-. Sus lágrimas comenzaron a salir
Era claro que el rubios no estaba en sus cinco sentidos, quizás se había drgogado pues sus pupilas estaban dilatas y su cuerpo temblaba
'No quiero perderte, Amy Después de mucho tiempo me siento completo, no quiero no verte nunca más, prefiero morirme'
¿Por eso los mataste? -. Amy lo miro sería mientras lloraba
'Si te encierran, que nos encierren juntos entonces'
Era lo más romántico que sus pobres oídos habían escuchado, lo acercó a ella tomándolo de el cuello de su ropa y lo besó, este no podría rechazarla tocó delicadamente su espalda, mientras el beso los guiaba a un nuevo lugar
El calor era agradable, el movimiento coordinado de sus labios no se perdió cuando ambos apartaban su ropa lejos
Amy bajó sus bragas y subió su falda, se aferraba al escritorio de los nervios, Tate tomó su duró miembro en su entrada, lo metió con fuerza embujandola hacía atrás, sus pies arqueados se aferraron a su cadera y sus manos a su cuello, Tate pasó su mano a su cuello apretando un poco fuerte con cada embestida
Su palpitante vulva se llenaba con todo su largo, sus paredes apretaban si falo, haciéndolo gemir fuertemente
Ambos disfrutaban sin duda, en sonido de sus bolas chocando con su cuerpo hacían eco en la habitación, apesar de el tamaño de Tate y su peso
La follaba de una manera fuerte, apretaba sus caderas contra el frío escritorio mientras ambos sentían el éxtasis venir, finalmente, Amy había terminado dejando salir sus fluidos en toda su polla
Langdon paró y salió de ella, la obligó a ponerse de rodillas vigorosamente y se masturbo hasta dejar salir su semen en su cara, limpió algunos restos con su lengua y ambos quedaron exhaustos en el pisó.
'Me iré contigo, no importa la forma en la que sea.'
