•°ʏᴏᴜʀ ᴛᴏᴜᴄʜ ɪꜱ ᴍᴀɢɴᴇᴛɪᴄ °•|soojun|

capítulo 11

Soobin.

Hace mucho que no golpeo con un balón, casi olvido cómo se siente ese dolor de cabeza.

Desperté en la enfermería, un poco confundido porque no sabía cuánto tiempo estuve ahí, pero justo a tiempo entró la enfermera.

—ya estás despierto. Tienes buenas noticias y malas. Lo bueno es que es una pequeña contusión, la mala es que tendrás que ir a la graduación con una venda en tu frente.

Casi lo olvido...

—cierto.

—mañana es tu graduación, debes estar feliz, sonríe un poco.

Es cierto, mañana es mi graduación, lo que significa que Yeonjun ya no será mi profesor y podré salir con él.

Siempre veía un lado positivo o simplemente no me rendía y resultaba irritante.

*****

Casa de Soobin

Soobin llegó de noche y sus padres adoptivos al ver su herida, se acercaron preocupados.

—¿qué pasó?

—es un pequeño golpe. Es todo—lo dijo con incomodida.

—está bien... tu ropa para tu graduación está lista.

Soobin entra a su habitación y ve que su ropa estaba en el perchero, en vez de causarle alguna emoción de alegría, le causaba tristeza.

—solo quiero recuperarlo.

Soobin.

Mi graduación llegó en un abrir y cerrar de ojos.

—¡somos graduados!

Todos gritaban de alegría y otros lloraban, la verdad es que empecé a sentir la emoción y el miedo por un nuevo comienzo aterrador.

—¡que empiece la fiesta!

Como graduados organizamos una fiesta de graduación en la escuela, algo pequeño en el gimnasio. Muchos profesores también asistieron.

—oigan, paren—Beomgyu se une al grupo—solo dos de los tres van a ir a la Universidad.

—¡oye! Si me esfuerzo mucho, podré entrar a una Universidad.

—sabes que no es cierto.

—¡te voy a golpear!

Comenzamos a reír hasta que una voz femenina me llama por mi nombre y todos volteamos a ver, se trataba de Mi Ra.

—hola, Soobin.

—hola, Mi ra.

—me alegra verte—sonríe.

—sí...

—nosotros ya nos vamos—los chicos se alejaron de nosotros.

—¿no te alegra verme?

Bajé la cabeza por unos segundos y al levantar la mirada pude ver a lo lejos cómo el profesor Kim, quién era nuevo, estaba conversando felizmente con Yeonjun, me enojé demasiado, pero en ese momento entendí que tal vez lo nuestro no sea posible.

—sí me alegra verte.

Fue un impulso.

Decidí abrazarla.

Yeonjun.

El profesor me contaba que Soobin también era malo y tuvo que tener clases con él.

—¿cómo hiciste para que... sea bueno?—le pregunté entre risas.

—lo amenacé, le dije que le diría al Director sobre sus escondites y escapadas con chicas, era todo un fuck boy, mira aún lo es—apunta con un solo dedo.

Voltee a ver a Soobin, estaba abrazando a una chica, sentí cómo todo dentro de mi se rompía.

—me tengo que ir...

—¡Yeonjun, espera!

El profesor Kim me siguió.

—¡¿qué?!

—dije que pares.

Su voz se hizo más gruesa.

—sé que tú y Soobin duermen juntos.

Lo que dijo hizo que me detuviera de inmediato y me quedara helado.

—¿qué?

—paso durante sus clases privadas ¿verdad?—escucho cómo da pasos hacía mi—¿Qué diría el director si se entera? O ¿sus padres? Que un profesor se acuesta con su alumno.

Todo se fue por el caño.

Si decía algo, podría arruinar mi carrera, pero más a Soobin, podría perjudicarlo a él, no quería que eso pasara.

—no le digas a nadie, por favor, haré lo que me pidas.

—¿enserio? quiero que te acuestes conmigo...

—¿qué?

—una noche, quiero probar algo nuevo, si Soobin puede contigo ¿por qué yo no?

Había mucho en qué pensar, pero en mi cabeza solo estaba Soobin.

—está bien... Lo haré.

Me llevó a un aula de clases comenzo a quitarme la ropa y a tocar mi cuerpo, me sentía tan asqueado, no quería que lo hiciera, pero no quiero que Soobin salga perjudicado.

Soobin.

Pude ver cómo Yeonjun se iba corriendo, me sentí mal, quise seguirlo pero en ese momento Mi ra me detuvo.

—me gustas, Soobin.

Me congelé al instante, tenía que ser sincero con ella. No quería lastimarla, pero ¿cómo haces que un rechazo duela menos?

—lo siento, Mi ra. Tú no me gustas.

—¿qué debo hacer para que gustes de mi?

—no me gustas... Amo a alguien más.

Debía saber a donde se fue Yeonjun, comencé a recorrer todo la escuela hasta que lo encontré, sese encontraba en el suelo mirando a la nada, estaba desaliñado y con una capa de sudor en su cuerpo.

—¿Yeonjun? ¿Qué tienes? Estas pálido.

—pasó otra vez... sólo quería salvarte y alguien se aprovechó de mi otra vez.

—¿qué? No, no digas eso, te llevaré a un médico, resiste. Por favor, resiste.

—lo siento...