Olimpiadas, ¿destino o casualidad?

02

Me desperté con voces. Efectivamente ya habían llegado algunos de mis tíos y mis abuelos por parte de madre, los padres del mío vivían en Canarias, así que no podían venir a Madrid.

- Vamos pesada que está ya todo el mundo - dijo Martí entrando y saltando encima mía

- Porque mañana me voy, sino ahora mismo te tiraría por la ventana - dije lanzándole almohadas

- Prométeme la firma de Pedri y Gavi o no te dejaré en paz - dijo saltando y esquivando todo lo que le tiraba

- Pero si me has dicho que eran del Barça y tú eres más merengue que Ancelotti enano - dije agarrándolo y haciendo cosquillas

- Pero da igual son los mejores - dijo intentando apartarse

- Niños dejad de pelear y venid a darme un abrazo - dijo mi abuela Josefina entrando en mi cuarto

- Abuuuuuu - dijimos los dos corriendo

- Qué frescas dormís las jóvenes de hoy en día - dijo mirándome el pijama, que era minúsculo y me tapaba el cuerpo de milagro

- Es que en esta casa hace calor Fina - dije riéndome

- A la Villa te llevas algo bien tapadito - dijo - a ver si vas a enamorar a algún niñito - rió

- Yo ya tengo al mío abu, no me hace falta más - dije riendo

- Venga cámbiate y baja, que tus tíos están ya aquí y tus amigos no tardarán en llegar - dijo dándome un beso

- Me ha dicho papá que va a venir un amigo de Pedri y Gavi a comer - dijo Martí tumbándose en la cama

- Estás obsesionado con esos dos - dije rodando los ojos y viendo qué ponerme

- ¿Me has escuchado? QUE VIENE UN AMIGO SUYO A COMER A CASA - dijo

- ¿Quién y por qué? - dije intentando no pegarle por lo pesado que era con esos dos

- Se llama Eric García, es el hijo de la nueva novia del tío Esteban - dijo

- ¿El tío Esteban tiene nueva novia? - dije riendo mientras que me hacía una trenza

- Lo que me extraña es que se presente en la familia con ella y su hijo - dijo él riendo

Me asombraba lo jodidamente inteligente que era mi hermano. Tenía la mentalidad de un niño mucho más mayor, aunque con las tonterías y la manera de sacar de las casillas de uno más pequeño. Pero hablaba como un reviejo.

- ¿Se puede? - dijo Isaac tocando la puerta

- Sí gordi pasa - dijo Martí imitando mi voz, porque siempre le decía eso

- Te vas a cachondear de quien yo te diga - dije tirándome encima suya y volviendo a hacerle cosquillas

- Vaya dos me han tocado - dijo Isaac riendo

Me dio a mí un beso y con Martí hizo el saludo que siempre se hacían.

- Venga vamos que me han dicho que están ya abajo - dije

- Enano, ¿sabes que viene Eric García? - le dijo Isaac a Martí cuando venían detrás mía

Miré para atrás y rodé los ojos. Otro.

- Sí cuñi, ¿jugará? - dijo rascándose la barbilla

- Pues creo que sí, que se va mañana también a Tokio - dijo Isaac, y Martí abrió mucho los ojos

- Martí por favor, ni se te ocurra decirle nada de los dos esos de los que estás obsesionado, que te va a mirar mal - dije

- Hombre si juega también no voy a decirle que quiero firmas de ellos y suya no porque a penas lo conozco, pero tú cuando estés en la Villa sí - dijo

- Qué te borres eso de la cabeza Martí, qué vergüenza - dije ya entrando al salón

- ¿Quienes te gustan enano? - dijo mi novio a mi hermano

- Gavi y Pedri, es que son buenísimos - dijo feliz

- Mucho - dijo mi novio sonriendo

- Hombres - dije yendo a saludar a todos, que estaban ya en el jardín

- Hola preciosa - dijo mi tío Esteban dándome un abrazo - cuánto tiempo

- Hola tito - dije sonriendo

- Mira ella es Marina, y él es su hijo Eric, también irá a Tokio - dijo sonriendo

- Encantada - dije saludando a los dos - ¿fútbol no?

- Sí - me dijo Eric - tú gimnasia rítmica por lo que me ha dicho Esteban

- Así es - dije sonriendo

- ¿A qué hora vas mañana? - me preguntó

- Pues tenemos dos opciones, a las 8 o a las 10 de la mañana - respondí yo

- Entonces igual que nosotros, la mayoría iremos a las 10 - dijo

- Cariño ve con él, así no vais Lucía y tú solas - dijo mi madre

Miré a Isaac el cuál me asintió con la cabeza. Le dije que sí, y seguí saludando a gente.

La relación con Isaac era genial, cero tóxica y nada de celos... me hacía sentir tan segura conmigo misma y con él que no había dudas entre nosotros.

- Hola guapis - dije abriendo la puerta a Lu y a Marco, que venían con los padres de la primera

- Hola cielo - me dijeron sus padres

- Nos vamos a las 10 al final, el hijo de la novia de mi tío también va, y me ha dicho mi madre que se siente mejor si vamos con él - dije

- Perfecto - dijo Lu, y sus padres asintieron sonriendo

Estuvimos todo el día pasándolo genial, disfrutando de los nuestros en familia, la verdad es que tanto nosotras como nuestros novios nos llevamos bastante bien con Eric, nos contó que tenía novia y que al igual que ellos, iba una semana después.

Nuestros chicos para agradecerle que mañana nos fuésemos con él, dijeron que le dijese a su novia que se fuese con ellos, así ella tampoco se iría sola, a lo que él asintió.

Finalmente nos despedimos todos, he de decir que se me escapó alguna lagrimilla al despedirme sobretodo de Martí, aunque lo volviese a ver dentro de poco, era mi niñito.

Me despedí de mis padres porque dormía en casa de Lu y al final dijo Eric que él nos recogía, ya que ellos dejaban los coches en el aeropuerto y así mi padre no tenía que molestarse en ir y venir. Despedirme de mis padres no me dio tanta pena, aunque sí más de la que pensaba.

Llegamos los 4 fantásticos a casa de Lu, y tras miles de mimos cada pareja en un sillón, nos fuimos a las habitaciones.

- Te amo, Juls - dijo Isaac antes de besarme para irnos a dormir

- Te amo muchísimo - dije yo volviendo a darle un beso