VI

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Enid estaba desesperada, no había despertado con las cinco alarmas que había colocado en la mañana y ahora se encontraba colocándose lo primero que vio en su closet mientras salía de su casa con el bolso abierto y sus botas sin atar.

Comenzó a correr al bus, viendo como éste pasaba por su lado sin siquiera mirarla. Todo mal.

—¡Oh, mierda! ¡Hijo de puta me viste! —exclamó hacia el bus que doblaba por la esquina, desapareciendo de su vista. Bufó enojada pero no podía echarle la culpa a nadie, ella fue quién no despertó a la hora.

Miró su reloj y faltaban 5 minutos para las 10, ya había llegado dos horas tardes a su primer día de trabajo.

Caminó en pasos apresurados hacia la cafetería que se encontraba a casi unos cinco kilómetros, el sudor corría por su frente y sus manos ya estaban pegajosas. La bufanda de colores le estorbaba y a veces tropezaba con sus propios cordones pero no iba a parar de caminar.

Sentía que sus piernas y pies comenzaban a quemarle así que al ver la primera banca se quedó sentada allí unos segundos dejando descansar su cuerpo.

—Ya voy dos horas tarde, qué más da si son unos minutos —murmura soltando un gran suspiro y respirando hondo, le faltaba la respiración y sentía que se ahogaba.

Antes de levantarse, siente como su teléfono comienza a vibrar en el bolsillo trasero de su pantalón, bufó molesta tomándolo.

—¿Qué? —dijo enojada contestando el teléfono, ni había visto quien la estaba llamando.

—Wow, parece que no te está yendo muy bien en tu trabajo —escucha una voz burlona y luego una pequeña risa. Ajax.

—Ajax, lo siento. Todavía ni siquiera llego al trabajo —pasa su mano por su frente arreglando un poco su cabello desordenado, se levanta de la banca emprendiendo nuevamente su paso hacia la cafetería.

—¿Qué? Dios santo, Enid. Por eso tus trabajos no duran mucho —una fuerte risa se escucha del otro lado de la línea, la rubia sólo rueda los ojos y una molestia llega a su cuerpo.

—Si vas a burlarte no tengo ganas de hablar.

—No, no. Lo siento. De igual forma, te dejo así llegas más rápido —sin contestar, Enid cuelga el teléfono apurando sus pies.

A lo lejos podía divisar la cafetería, se encontraba en toda una esquina y era un poco llamativa por los colores de los carteles.

Eso fue lo primero que le llamó la atención a Enid, los colores pasteles que estaban dentro del local como por fuera, muy pocas veces había comido ahí pero el ambiente era demasiado agradable, colocaban música calmada y cuando supo que estaban buscando personas para reemplazar a una de sus meseras lo primero que hizo fue mandarles un email con su currículum, al día siguiente la habían llamado para concretar una entrevista.

—¿Y a qué te dedicas Enid? —era una mujer de pelo blanco, demasiado alta que la dejaba como una hormiga cuando estaba a su lado, sin ánimos de ofenderla.

—Ahora mismo estoy estudiando Artes en la Universidad de Nevermore, voy en mi segundo año —le dedicó una sonrisa cálida tratando de ocultar su nerviosismo, a pesar de que ya ha tenido unos veinte trabajos en el último mes su pánico escénico y social no desaparecía.

—Qué lindo, tengo una amiga que su hija estudia allí pero creo que Literatura —hace una mueca tratando de recordar pero niega con su cabeza—. Ella frecuenta mucho acá, así que es muy probable que la veas cuando empieces a trabajar.

—¿A trabajar? —Enid no había prestado mucha atención a lo primero que había dicho pero luego cayó en cuenta que la estaba contratando.

—Sí, tu currículum es excelente y por más que esto sea un reemplazo temporal, si eres buena y eficiente, podríamos hacer un contrato permanente —la mayor le sonrío mostrando su dentadura blanca.

Enid no podía estar más que feliz, se levantó de su silla y se dirigió a abrazar a Larissa, ella sorprendida correspondió el abrazo.

Quién diría que esa Enid tan feliz por conseguir trabajo esté llegando tarde a su primer día.

Al abrir la puerta pequeñas campanas sonaron notificando su llegada y el piso causaba que sus botas rechinaran con la fricción de sus pasos.

Cuando vio a Tyler corrió hacía él con su rostro lleno de tristeza y preocupación, buscando una excusa lo suficientemente creíble para que no la echaran en su primer día.

—¡Lo siento, lo siento! El bus quedó sin gasolina y tuve que esperar otro, ¡de verdad lo siento no volverá a pasar jamás! —qué excusa más tonta, en su vida había visto un bus sin gasolina.

—Ve a cambiarte —se sorprendió como el chico le dedicó una sonrisa divertida y abrió la puerta del interior de la cafetería.

Ella asintió y corrió dentro, el chico la siguió.

—Toma, aquí está tu delantal con tu nombre. Y bueno, ya sabes qué hacer.

Enid tarareó en afirmación y tomó el delantal de color verde pastel, parecido a la temática que tenía la cafetería. No le agradaba mucho el color, pero lo bueno es que en su bolso había traído diferentes pines.

De unicornios, k-pop y uno... de la bandera lésbica.

—El primer pedido que quiero que hagas es el de la chica de allí —Tyler le había dicho una vez que habían salido hacia el mostrador, señaló a una pelinegra que estaba de espaldas en una esquina de la cafetería, bien apartada de los demás—. Ya pidió, pero siempre pide de nuevo así que para ahorrarle que se levante y venga, anda y le ofreces algo.

—Okay —Enid caminó en pasos un poco apresurados hacia donde estaba la chica, podía escuchar como sus dedos golpeaban el teclado de su laptop de forma rápida.

Wow, qué ágil.

—Hola, soy Enid —sonrió viendo como la chica volteaba su cabeza dejando ver su rostro. Su hermoso y perfecto rostro.

Amor, Enid no sabía mucho del amor, nunca había llegado a sentir eso tan hablado y conocido en películas como en libros, nunca pudo decir que estaba enamorada de alguien ni menos decirle te amo.

Pero siempre quiso sentir eso, sentir mariposas en su estómago, sentir como tus mejillas se sonrojaban cada vez que te mirara o sonriera esa persona, sentirte tan feliz por el hecho de que te habló.

Y ahora por fin creía que le iba a ocurrir.

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SE ME OLVIDO ACTUALIZSFENNFKD

perdonenme estuve llena d tareas, gracias x votsr :))

first sight ; wenclairWhere stories live. Discover now