LA PROMESA----- ̈Hermione X Draco Malfoy ̈

3. Quiero cambiar de casa.

Mis ojos se empiezan a abrir lentamente, siento como mi  cabeza está aturdida y y los recuerdos llegan a mi mente, creo que ... me desmaye.
Me siento de inmediato en la cama donde estoy, puedo ver más camillas al lado mío y el color tenue de la iluminación, estoy en la enfermería. -Por fin despiertas Hermione. Dime cómo te sientes- Dijo la enfermera
-me siento bien. (Aunque estaba un poco confundía y aturdida aún)
-es normal si estas confundida, estuviste dormida por unas horas. Pero lo que me preocupa es el estado en el que llegaste, estas más delgada de lo normal, y tus defensas están muy bajas. Dime, ¿has estado comiendo bien?
-la verdad es que no. E estado viviendo sola desde las vacaciones, me preparo mi propia comida pero a veces no me daba hambre y lo dejaba pasar. (La verdad es que han sido maeses depresivos para mi. No tengo a mis padres ahora, y el único apoyo moral que me queda es el de mis amigos y el de Ron y no supe nada de ellos hasta ahora)
-Bien. Ese es el problema entonces. Necesitas comer más, tomar aire fresco, te daré esta poción que debes tomar antes de tus comidas, si eres constante y te aplicas, en una semana te sentirás como nueva.
-muchas gracias enfermera.
La enfermera se retiró, parece que soy la única en la enfermería, claro quien más va a estar aquí tan solo el primer día de clases. Todo parece tan calmado y apacible en esta parte del castillo.

Me había acostumbrado a estar sola, estos meses realmente fueron duros para mi. El peso de todo callo sobre mi cuando en encontraba completamente sola en esa casa. Los días se hicieron semanas, y las semanas meses. Y solo me tenia a mi y a mi compañía para sobrellevar mis días. Termine todos los libros que tenía por leer en poco tiempo. Y me dediqué a mandar cartas a todos mis amigos incluyendo a Ron. Aún no me sentía con la libertad de llamarlo mi novio, puesto que el nunca me lo pidió. Y aunque no fuera así yo sabría esperar por el, porque me pidió un tiempo. Así que esas cartas nunca las envíe. Solo se quedaron en mi habitación, Con la esperanza de un día ser entregadas  a su destinatario.
Ahora me encontraba inmersa en mis pensamientos no pudiendo ignorar mi situación actual. Mi nuevo año en Hogwarts iba a ser muy distinto. Ahora soy una Slytherin. ¿Que se supone que significa eso? Todos en esa casa me odiarán. "Soy una sangre sucia" Odio escuchar esa palabra y ahora todos a mi alrededor la dirán.
No estoy conforme con esto tengo que hablar con McGonagall.
Me puse de pie para irme de la enfermería y dirigirme a la oficina del director.
Camine por los pasillos sin ver ninguna cara conocida. En estos momentos me pregunto donde están mis amigos.
Mi cara se iluminó cuando los vi a todos dirigirse hacia la enfermería.

-Hermione! Aquí estas -Dijo harry corriendo hacia mi para abrazarme.

Después de el le siguió Ginny y Luna.
Y por último Ron. Estaba tan feliz de verlo que mis lagrimas salieron.
-Me alegra tanto que estés bien- Dijo Ron preocupado- Pero ¿porque no estás descansando en la enfermería qué haces aquí?
-Es que ya me siento mucho mejor- le conteste-ya hablé con la enfermera y me dijo que podía irme, ademas necesito hablar con McGonagall, necesito que me cambie de casa, no puedo estar en Slytherin. 
-bueno...estoy de acuerdo con eso pero, creo que es más importante que descanses- Dijo Ron

Cuando Ron estaba hablando vino un recuerdo a mi cabeza. Un pequeño flashback del momento en que me desmayé. Recuerdo ver un cabello rubio, perteneciste a la persona que me levanto en brazos antes de que cayera al suelo. Voltee un segundo a mirar a Ron y su lindo e intenso cabello pelirrojo, obviamente no fue el quien me cargó. En el fondo de mi sabia la respuesta pero me parecía tan raro aceptar que Malfoy fuera quien me auxiliara.
Aún así no me atrevía a preguntarle a nadie hacer a de eso, porque me dolía un poco en mi ego el hecho de que el chico que me gusta no pudo ayudarme.
Todos estaban en silencio cuando luna rompió el hielo.
-entonces no estás dispuesta a los cambios? A mi me encanta mi casa nueva, ya visitamos la sala común y es hermosa, estamos muy cerca de los elfos domésticos, y me encanta conversar con ellos. Hasta Ron dijo que era un lugar increíble.
-bueno... es verdad me agrado el lugar, así que creo que deberías pedir cambiarte de casa y venir a Hufflepuff  con nosotros- dijo Ron.
-bueno.. veré que puedo hacer-Dije no muy convencida.
Me despedí de todos y me puse en camino a ver a McGonagall.
Llegue a la entrada de la dirección. El mismo fénix adorna la entrada, todo está en su lugar como si nuestro antiguo director nunca se hubiera ido.
-hola directora McGonagall. Puedo hablar con usted un momento.
-hola si, toma asiento por favor. Dime ¿cómo te sientes? ¿Estas mejor ahora?
-si claro. Me siento mucho mejor. La verdad ahora quisiera hablar de otra cosa que no sea mi salud. Siento que esto es más importante.
-veo que no has cambiado en nada, te preocupan más otras cosas más que tu propio bienestar.
-bueno lo que quiero hablar ahora si es por mi propio bien. Directora no estoy conforme con la elección del sombrero. No quiero ir a Slytherin.
-Hermione te conozco bien. Se que eres muy lista y tendrás tus buenas razones. Pero ahora tu responde mi pregunta. ¿Porque crees que tomamos esta decisión? ¿Porque cambiar las cosas estando en su último año? 
-la verdad no tuve mucho tiempo de pensarlo pero, su excusa de que había que emparejar a todas las casas en lo académico no me pareció muy convincente.
-¿entonces que piensas tú? ¿Porque crees que es?
(Me quede esperando su respuesta)
Bueno Hermione, durante la guerra con Voldemort, muchos estudiantes de Slitherin estuvieron de su lado. Mi deber como directora fue ponerlos bajo castigo pero ahora que inicia un nuevo año escolar, quiero darles una segunda oportunidad. No quiero que se sientan excluidos, y no quiero fomentar el odio hacia ellos. Si los dejaba a todos en Slytherin quizá ellos seguirían con ideas erróneas en su cabeza, necesitan conocer a nuevos personas. Y por otra parte a los estudiantes de las otras casas, necesitan quitarse prejuicios hacer a de los Slytherin. Creo que si las cosas salen como lo planeamos los profesores, los alumnos van a tener una oportunidad de redimirse.
-no había pensado en eso- le conteste sorprendida por lo que acababa de escuchar.
-y ahora tu me dices que estás inconforme con la decisión del sombrero, pero yo pienso que el sabe que tú tienes asuntos que arreglar en esa casa. Eres una bruja excepcional. Se que brillarás en cualquier casa en donde estés. Pero quiero que respetes la decisión del sombrero.
Y creo que no te irá tan mal vi que tienes un nuevo amigo de Slytherin.
-¿Que? ¿Porque lo dice?
(Viene de nuevo a mi mente el recuerdo de Draco cargándome a la enfermería)
-Malfoy que bueno que estás aquí, por favor acompaña a la señorita Granger a su sala común por favor- Dijo la directora concluyendo así nuestra conversación.
(Mi mirada se dirige a la entrada de la habitación. Donde vero a Malfoy con su metro ochenta observándome a lo lejos. No puedo evitar sentir como mi corazón se empieza a acelerar).