Capítulo dos: Recordando

56 15 14
                                    

"𝔸𝕞𝕠𝕣 𝕖𝕤 𝕖𝕟𝕥𝕖𝕟𝕕𝕖𝕣 𝕢𝕦𝕖 𝕝𝕒 𝕗𝕖𝕝𝕚𝕔𝕚𝕕𝕒𝕕 𝕔𝕠𝕟𝕤𝕚𝕤𝕥𝕖 𝕖𝕟 𝕧𝕖𝕣 𝕤𝕠𝕟𝕣𝕖í𝕣 𝕒𝕝 𝕠𝕥𝕣𝕠"

.
.
.

Los dos chicos entraban juntos al departamento, riéndose a no poder más.

Dante le había contado que había estado recordado la primera vez que se conocieron, cuando intentó ser héroe y terminó con un chinchón en la cabeza.

-No te rías, me había causado mucha inquietud, pensé que habías fallecido y que terminaría en la prisión, porque tú no despertabas -manifesta el más joven cuando coloca las bolsas sobre el mesón.

-Mi vida, un solo golpe de esos no podría matarme, necesitan más que eso para separarme de ti, porque aunque no lo creas esa primera vez que te vi, ya te eche el ojo, pero sabes cuando si sentí pánico, cuando conocí a tu madre, hasta los huevos me temblaban -dice Dante haciendo una mueca.

-Ni me los menciones que de solo recordarlo es como si lo volviera a vivirlo.

Ambos jóvenes se quedaron mirandose en silencio, tal vez recordando lo que sucedió en aquella ocasión.

Meses atrás

Félix se encontraba ansioso y nervioso por igual, caminaba de aquí para allá en la sala esperando el mejor momento para decirle a su mamá que tiene novio y que solo falta minutos para que llegase y él aún no sabía cómo decirle, en realidad ya sabia, pero no encontraba las agallas suficiente para enfrentarse a su implacable madre.

-Madre -la mujer estaba hablando por teléfono mientras a otra chica daba instrucciones sobre que tela, su asistente, le decía que tela sí y que no -Madre necesito hablar contigo. -insistió.

-Espera cariño, ahora estoy ocupada -miro hacia otra dirección -Catalina ese color no, el rosa salmón acaso debo de repetir dos veces todo para que entiendas.

La mujer se encontraba hablando a uno, reprimiendo a otros e ignorando a su hijo, que no era novedad para él ver a su madre tan metida en su trabajo, ha sido así desde que su padre falleció.

-TENGO NOVIO -grito, haciendo que el personal que se encontraba en el otro cuarto organizando telas y su madre se detuvieran.

-Todos tómense cinco minutos -le dice a sus empleados -ahora sí, tú dime, ¿como que novio? ¿Desde cuándo? ¿Como y porque? Explícate ahora.

-Madre te acuerdas esa vez que me asaltaron y alguien me salvo, bueno ese chico es mi novio y viene para acá para verte.

-¿El chico pobre? -dijo en un tono de sorpresa y rozando lo despectivo -Te ahorro el trabajo, dile que no venga, que no estaré disponible, tengo mucho que hacer y poco tiempo, además ya deje bien claro lo que pienso de él, le agradezco que te haya ayudado, pero eso es todo, no me gusta y no me gustará que te relaciones con personas de su clase.

-Mamá no empieces por favor, Dante es un buen chico, no tiene dinero ¿y qué? Tiene muchos atributos que lo hacen mejor persona que cualquiera que tenga dinero, por ejemplo tu protegido George, siempre se burla de mí.

-No creo que George sea capaz de lo que lo acusas, es un buen chico, conozco a sus padres y a él desde que nació, prácticamente ambos crecieron juntos.

-En efectos, pero también es cierto que no me soporta y yo tampoco a él, y mucho menos ahora que tiene ese nuevo grupo de amigos, donde su deporte favorito es molestarme, solo por el simple hecho que no me permites hacer deportes tan básico como jugar fútbol o andar en patines como todos los chicos de mi edad.

-Eso es lo de menos, tú no eres como todos los chicos y lo sabes muy bien, respecto al chico ese, terminas con él ahora mismo, anda saber que mañas tiene y vos de tonto vas y caes.

-Madre solo te pido una oportunidad, cuando te he pedido algo, nunca, siempre he hecho lo que me pedías, nunca te he dicho que no, tampoco te he dicho que los chicos se ríen de mi enfermedad, que solo se aprovechan de mí, he dejado de lado mi dignidad por un poco de aprecio y cariño cuando solo recibía migajas, pero con Dante es diferente él no me pide nada a cambio, las veces que nos vimos nunca me dejó pagar, con él siempre sonrió por cualquier cosa, me hace ver qué hay más porque reír que porque llorar, por eso te pido que le des una oportunidad no te pido que lo quieras o lo aceptes, pero no lo rechaces por favor.

La madre está renuente a dejarse convencer, pero también es cierto que lo ha visto más feliz este último tiempo y eso la hace feliz a ella.

-Está bien, si tanto lo deceas, lo recibiré y le daré cinco minutos de mi valioso tiempo, y no me pidas que le sonría o le de cumplidos me escuchaste, cinco minutos.

-Es suficiente para el primer encuentro -sonríe.

Félix sabía que era un buen comienzo, ahora todo queda en como Dante se presente.

Autora: danna
Univers

Bạn đã đọc hết các phần đã được đăng tải.

⏰ Cập nhật Lần cuối: May 11 ⏰

Thêm truyện này vào Thư viện của bạn để nhận thông báo chương mới!

30 Días Y Un Adiós Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ