Un joven llamado Elías Harrison, nacido en los Estados Unidos, Los Ángeles (California). Se enfrenta a maltratos, criticas, juzgaciones de parte de sus compañeros, profesores incluso de sus propios padres por el simple hecho de ser cristiano, pero e...
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Mientras Yo Crea En El.
Viernes 8 de Mayo, Cuidad de Los Ángeles (California) -8:00 A.M.-
3 años después...
Lizbeth Johnson.
―Que bueno que puedas quedarte conmigo un tiempo, me alegra que tu pasantía fuera en la misma cuidad en la que estoy estudiando― sonríe emocionada ―Thomas... Hey, ¿oye estas escuchandome?
Vi como seguía en su celular sin prestarme la mas minima atención, me acerqué a el y llegué a ver lo que tanto hacía en el celular.
El estaba hablando con... ¿Una chica?, ¿es de verdad?
―¡¿Quién es esa?!― grité a su oído.
―¿Qué te pasa Lizbeth?, ¿quieres reventarme el tímpano o qué?― dijo molesto.
―Pues es la unica forma en la que me prestas atención, ¿quién es esa?
―¿Quién es quién?― dijo mientras vi como trataba de ocultarlo.
―No te hagas, sabes de que te estoy hablando― le mire seria ― deja de ocultarlo ya lo vi, además somos hermanos, nos contamos todo ¿recuerdas?, ¿qué no confias en mí?
―Claro que confío en ti, pero es complicado no lo entenderías.
―Bueno haré todo lo posible por entenderte, dime que pasa.
―Bueno, es que... ¡Ay!― me pare del sofá mientras hechaba mi pelo hacia atrás y de mi boca salia un grito de frustración.
―¿Es tan serio?― me acerqué a el ―oye tranquilo, lo arreglaremos juntos, estoy aquí para ti. Es una promesa― dije para luego entrelazar nuestros meñiques y sonreirle.
―Lo se Minion, al igual que yo para ti, pero no es algo que se pueda arreglar, osea, como te dije es complicado
―Bueno ya dejate de rodeos y dime de una vez― reproché algo fastidiada.
―Si te digo... Debes prometerme algo.
―A ver― me crucé de brazos.
―Que no me vas a juzgar y que me dejaras hablar.
―Esta bien.
―Tengo novia.
―¡¿Qué?!― dije impactada.
―Shh, has silenció, no se como no te han hechado de este apartamento, eres super ruidosa.
―Pero, ¿desde hacer cuanto tiempo? ¿es cristiana?, ¿papá y mamá lo saben?, ¿por qué no me dijiste nada?, ¿y cual es el problema?
―Ahí es donde quiero llegar, no le he dicho nada a papá ni a mamá porque... Ella no es cristiana, no creé en Dios como nosostros Liz― dije algo apenado.
