Parte 2

416 47 8
                                    


—¡El espectáculo se ha terminado, ve y actúa de una vez!

—...

—¿Te revelas en contra de tu salvadora?

—...

—¿Sabés que también soy una Diosa verdad?

—...

—Al menos respondeme.

La liebre blanca que rescate de ser absorbida por un árbol maldito se encontraba al frente mío.

—¡¡¡Arrg!!!

Y debajo de nosotras estaba la bestia felina que nos topamos hace poco y que al parecer no tiene planeado irse.

—Ahg... ¿Hasta cuando vamos a estar aquí?

—...

Esa liebre decidió seguirme cuando la salvé, no tuve problema en ello, pero ahora me encuentro en la rama de un gran árbol junto a ella y al parecer no tiene planeado obedecer mi orden de bajar a enfrentar a esa bestia.

—Tengo una misión sabes.

—...

—Y esa criatura solo me esta ¡estorbando!

—...

—Así que te ordenó que ataques a esa ¡cosa!

—...

—Se supone que es acá en donde revelas tu poder oculto para salvar la vida de tu Diosa.

—...

—¡Agh! Estoy arta de esta conversación.

- Crask -

—...

—...

—¿Qué fue ese sonido?

—...

- Crask -

—No no no. Ese sonido no puede ser...

- ¡Crask! -

—¡La rama se está rompiendo!

—...

—Pero soy una Diosa se supone que tengo un peso ideal.

- Crack -

—Si tengo un cuerpo perfecto, entonces... Tú, tú eres el que nos está condenado...

—...

—...

—...

—Pero no puedo juzgarte con esa pequeña cara.

—...

- ¡Crrak! -

—Supongo que hasta aquí llegamos, pequeña amiga que conocí hace una hora, tuviste el gusto de conocer a una Diosa.

—...

—Supongo que será rápido, solo no mires abajo.

Abracé fuertemente a la pequeña liebre blanca y cerré los ojos en señal de aceptación de nuestros destinos.

No puedo creer que en serio esto me esté pasando. Acaso hice algo que mereciera esto, estoy segura que no.

De echo la culpa de todos mis problemas recae en ese NEET, empezando desde que me escogió como un objeto para traer a este mundo hasta ahora que tendré que morir por su culpa.

Si, todo es su culpa.

Y tendré que ir a quejarme por ello.

—¡...!

En Busca De Ti (AquaxKazuma) Where stories live. Discover now