Un nuevo inició, el fin del dios Herrero

Prólogo

Ya habían transcurrido días desdé lo que se denominó el punto de quiebre, la vida de Hefesto ya era conocida por ser miserable y todo éso pero había algo que le mantenía era su amada Aglaya aquella mujer que no juzgaba su apariencia y parecía amarlo geniunamente pero todo habia acabado de golpe.

-no puedo creer que cayeras en esa ilusión por tantos años, realmente eres el ser más patético que hay en el mundo! de verdad creíste que alguien realmente te amaría con ésa horrible forma?!

Era lo dicho por Afrodita enfrente de todos tras revelarle la verdad, Aglaya jamás había existido todos estos años Afrodita habia usado sus poderes para hacerle creer que existía una diosa menor de su séquito que se había enamorado de él y romper su corazón en el momento que ella deseará nada más por capricho y también por el incidente con la red además que otros dioses y criaturas que servían al Olimpo sabían de esto tratando de no arruinarlo al reír por ver un Hefesto hablando completamente sólo.

-mientes... mientes... mientes... mientes... mientes... mientes... MIENTES!!!!

Repetía para si mismo Hefesto ignorando completamente las carcajadas de los demás dioses y seres que habitaban el olimpo pero rápidamente su tristeza había sido remplazada por furia, todos los años de engaños, abusos, cuidar bastardos que terminaron dándole la espalda todo lo habia soportado pero ésto finalmente lo había quebrado.

-es lo que un inútil cómo tu merecía

-sólo porque papá estaba ocupado siendo un verdadero dios nos criaste que bueno que el finalmente...

Antes que siguieran su palabrerio, Phobos y Deimos eran desintegrados en un torbellino de llamas azules y todos miraban a Hefesto el cuál ya no tenia expresión en su rostro pero sus pupilas ardían en intensas llamas de aquel color y sólo daban a entender una cosa "todos deben arder"

-ese desgraciado mato a nuestros hermanos!

-pagaras por ésto maldito!

Con un simple chasquido las alas de Eros y Anteros ardían haciendo que inmediatamente cayeran al suelo retorciéndose del dolor mientras Hefesto soltaba un fuerte golpe al suelo crendo una gran llamarada que habia reducido a cenizas a todos los seres que se habían burlado de él con excepción de los dioses por otra parte Ares al ver a sus hijos ser heridos y dos prácticamente asesinados aunque Hefesto sólo habia destruido sus cuerpos y sus almas habían parado en el Hades de dónde volverían al cabo de un tiempo éste ignoraba por completo esto avalanzandose sobre Hefesto cuál si fuera un animal rabioso.

-yo mismo te mataré maldito lisiado cómo te atreves a lastimar a mis hijos maldito engendro mal parido!!!!

- ... ... largo...