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Ha pasado un mes y con ayuda de Alfred, Harry se ha atrevido a recorrer el castillo, cada habitación y sala de estar a la que tiene permitido entrar, lo que parece ser gracias a la autorización del rey Louis, incluyendo la biblioteca personal de la difunta reina Johanna, misma que el pasado rey Mikael mando a construir para ella durante el embarazo de su primogénito.

Aunque el rizado no ha visto al monarca en sus 28 días de estadía en el palacio, el príncipe agradece las comodidades que el castaño le ha brindado, quiere decir, Harry podría encontrarse en los calabozos encerrado en la oscuridad en compañía de las ratas. En cambio los empleados del palacio le han asegurado que el soberano les ha ordenado atender las peticiones del príncipe Harry como si fueran las propias y el rizado no sabe por que demonios Louis, su captor, bien técnicamente él acepto venir a Abalyr aunque sin muchas opciones de cuales elegir ya que era venir para pertenecerle al monarca o rehusarse y llevar a su pueblo a la guerra una vez más, en fin no entiende por que el mezquinó gobernante otorgaría tal trato. Como sea, el ojiverde no tiene tiempo de seguir pensando en eso cuando el hombre responsable de sus comodidades camina por el pasillo, justo al alcance de su vista.

El rey Louis va caminando a pasos apresurados por el pasillo principal de su castillo en dirección a la sala de reuniones donde su consejo ha llamado a una junta, el castaño jura que si se trata sobre como debe casarse con una bella doncella y tener herederos, clavará su espada en el pene y vagina de cada responsable de esta reunión.

—Rey Louis.

Llama una voz detrás de él y el ojiazul de inmediato sabe a quien le pertenece. Con el rostro en blanco el rey gira sobre sus talones.

—Principito.-saluda con un simple asentimiento de cabeza y vuelve a girar con Zayn detrás de él.

—Su magestad.-llama de nuevo el rizado acelerando su paso hacia el hombre que lo ha ignorado desde que lo trajeron a este lugar.

—No tengo tiempo ahora.-dice cortante hacia sus espaldas, salvándose la molestia de volver a girar sobre sus talones en dirección de la dulce y profunda voz y alargar su tiempo fuera de su escritorio desde dónde maneja su reino.

—Me haz ignora el último mes, no se para que me trajiste si iba a permanecer encerrado aquí.-se queja el rizado abrasando el libro que ha sacado de la biblioteca a su pecho, y bien tal vez al rizado le gusta jugar con fuego, ya que en realidad lo siguió para agradecerle la habitación, el buen trato e incluso tal vez que no lo haya violado ya, pero su actitud lo hace querer provocarlo.

La exasperada voz del rizado hace que los pasos del monarca se detengan girando una vez más y ahora su rostro no esta en blanco, si no teñido por irritación.

—No tengo por que darte explicaciones, ahora vuelve a tu habitación y ahórrame escuchar tus berrinches, niño.

Se gira sin más, caminando decidido a que nada detenga su rumbo, ni siquiera el bufido que el príncipe emite detrás de él antes de susurrar un "no soy un niño, idiota" que logra atravesar sus canales auditivos.

Una vez que doblan la esquina, Louis le llama a Zayn con la mano.

—¿Qué sucede?-pregunta el caballero una vez que llega a un lado del rey, su estupida mueca burlona le hace saber que ha escuchado la ofensa del príncipe hacia su persona y le ha parecido gracioso, el rey debe conseguir otros amigos.

—Dile a Liam que visite al príncipe Harry en su habitación, que lo lleve a recorrer el reino e investigue que es de su interés.

—¿A la mano derecha del rey?-pregunta realmente confundido el soldado.

—Si, a tu esposo, ¿conoces otro Liam?

—Louis, par-

—Y que lleve guardias, al menos cinco, necesito saber que está seguro o los mataré a todos.

Zayn mira extrañado a su amigo, al monarca de su hogar, como si le hubieran salido tres cabezas, el príncipe acaba de insultarlo y el castaño ahora quiere saber más de él.

—¿Desde cuando importa que el niño esté aburrido? Cogetelo así se le-

—Es principe Harry para ti.-brama el castaño continuando su caminata sin esperar al otro hombre.—Ahora, Malik, ni una palabra más o te arranco la lengua.

La frívola honestidad en la voz del monarca hacen que el guerrero baje su rostro en señal de respeto y con un pequeño asentimiento expresé un "Si, señor." hacia su mejor amigo retirándose del pasillo en busca de Sir Liam.

.

—¿Quiere que vaya con el príncipe a pasear por la ciudad?

Liam toma asiento en la cama que comparte con el hombre pelinegro que no deja de pasearse de un lado al otro frente a él.

—Eso dijo y también algo sobre investigar que es lo que disfruta hacer o una mierda así, amor, creo que Louis ha perdido la cordura.

La mano derecha del rey mira a su esposo por unos segundos, el atractivo rostro se encuentra contraido en una mueca verdaderamente preocupada, cada arruga en su rostro expresa confusión y detras de sus ojos puede observar pensamientos pasar a una velocidad extrema tratando de llegar a una conclusión. Liam sonríe con cariño antes de pararse del lecho y caminar hasta el guerrero, tomarlo de los hombros para detener su andar y comenzar a dejar besos fantasma por todo su rostro hasta que el hombre suspira, sus músculos ceden y Zayn se vuelve gelatina en sus brazos.

—El rey está bien, Amor.

—Me amenazo por decirle niño al extranjero que EL capturo.

—Diplomáticamente hablando el no lo capt-

—¡Liaaammm!

—Bien, aceptaré que estas ordenes no son características de Louis, pero creo que solo quiere hacer sentir más cómodo al príncipe Harry.

—Pero, ¿por qué?

—Eso no lo sé, tal vez Alfred le ha platicado un poco sobre el peculiar noble.

Zayn se separa de los brazos de su esposo con una nueva mueca en su rostro, una que arruga su entrecejo mientras mira directamente a los ojos del hombre que ama.

—¿Tú sabes algo que yo no?

—Eso, amor mio, no es algo que pueda responder.

—¡Ugh, a veces odio tu alto rango!-vira los ojos el pelinegro.

—Mentiras, amas que tenga más poder que tú.-susurra coquetamente el ojimiel en el oído de Zayn, y Liam sonríe cuando la reacción de su esposo es empotrarlo contra la pared y hacerlo suyo antes de que el ojimiel tenga que partir en busca del príncipe y un carruaje.

KingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora