SO IT GOES | lestappen

I.

2/1/23

Después de aquel encuentro ambos pilotos empezaron a verse más a menudo. Era curioso siempre habían sido rivales pero ninguno se odiaba al otro solo se tenían respeto. Bueno Max tenía un sentimiento que iba más allá.

El timbre empezó a sonar y Max a gruñir, era temprano joder por qué lo iba a levantar a las 9 de la mañana de un 2 de enero aún con resaca de año nuevo, fiesta que pasó con su familia en Holanda y luego el mismo 1 de enero por la tarde volverse a Mónaco. Pero aquel sonido empezaba a quemarle el cerebro y los oídos. Se levantó y cruzó el pasillo hasta llegar a la puerta. Al abrirla casi deja de respirar por un segundo.

¡¿Qué coño hacía Charles Leclerc en la puerta de su apartamento un puto 2 de enero?!

Osea sí, se llevaban bien y ya se podían considerar amigos pero dentro del tiempo que empezaron de nuevo nunca había aparecido en la puerta de su casa con ropa deportiva. Llevaba una camiseta fina deportiva que se tallaban a sus bíceps, Max estaba seguro que también se podía ver la forma de sus pezones. Luego unas calzonas que le dejaban unas piernas hermosas y ejercitadas y unos tenis de correr. Intentaba disimular sus miradas hacía los bíceps del monegasco, joder sentía como se estaba poniendo duro en aquel mismo instante.

— Mateee. — Saludó Charles. — ¿Me dejas pasar? — Preguntó sacando de sus pensamientos al rubio.

— Ehh si perdón. — Le dejó espacio para que pasará y en vez de cerrar la puerta sus ojos se posaron en el culo del Charles, aquellas calzonas le hacían un buen culo. Joder tan sólo era un hombre enamorado de su rival. Parecía haber tardado años en cerrar la puerta. — ¿Y qué haces por aquí?

— Año nuevo, nuevas metas. — Respondió con una sonrisa de oreja a oreja. El corazón de Max dio un giro. — Y una de esas metas es hacer ejercicio con mi nuevo amigo Maxy.

«Amigo» Se sentía tan bien pero a la vez dolía tanto aquella palabra para Max.

— ¿No hubiera sido buena idea que me hubieras avisado antes? — Preguntó Max regalándole una sonrisa un poco confusa.

— Los mejores planes son cuando menos te los esperas ¿No? — Respondió Charles intentando buscar una respuesta ingeniosa. Esto hizo sonreír a Max como un niño.

— Bueno me iré a vestir. — Dijo retirándose de la sala.

— ¡Esa es la actitud Max! — Le gritó desde el salón Charles.

Cuando volvió de cambiarse se encontró con una tierna imagen de Charles y Sassy jugando. Siempre pensó que Charles era más de perros pero resultó que le gustaba cualquier animal menos las serpentinas (y en ocasiones los monos). No como con Lando que casi siempre era atacado por cualquier animal incluso si era doméstico.

Al ver a Sassy jugar con las pulseras de Charles y este acariciandolo hizo que su corazón se parara, escuchar a Charles regañar a un gato para que no rompiera sus pulseras era la cosa más tierna del mundo. Finalmente se aclaró la voz llamando la atención del contrario.

— Ya estoy listo, ¿Nos vamos? — Dijo Max viendo cono Charles se levantaba del sofá para dirigirse a la puerta con él.

— Nos vamos. — Le respondió saliendo primero para luego cerrar la puerta con llave y salir al exterior.

Ya llevaban un buen rato corriendo por el paseo marítimo de aquel país pequeño. Los bíceps ejercitados de Charles brillaban por la luz solar y las gotas de sudor que recorrían aquella parte del brazo. A su misma vez la camiseta parecía que apretaba más en aquella zona. Max observó aquello por el rabillo del ojo, quería morder aquellos bíceps y dejar su marca. Finalmente giró la cabeza y vio a Charles, estaba con la boca entreabierta para poder respirar mejor y sudor caer en su cara. La camisa parecía que le apretaba cada vez más y se podía ver sus pectorales. Todo Charles brillaba por el sol y el sudor.

Aquello no ayudó para nada al holandés sintiendo como se estaba poniendo duro y su polla presionar los calzoncillos. Se paró en seco llamando la atención de su compañero.

— ¿Estas bien, amigo? — Preguntó el Monagesco algo preocupado.

— Creo que esto de ganar tantas carreras ya me está haciendo un poco viejo. — Bromeó Max, el chiste le hizo gracia a Charles pero este solo puso sus ojos en blanco. — Volveré a mi departamento, si quieres nos vemos más tarde.

— ¿Estas seguro? — Preguntó otra vez Charles. Max solo asintió. — Ok genial, nos vemos más tarde.

Genial Max, la acabas de liar. Pensó para si mismo volviendo a su casa. "Nos vemos más tarde si quieres" Se repitió a sí mismo burlándose de él. Casi te da algo por haberlo visto hacer ejercicio delante tuya y encima estas duro y le dices que nos vemos luego. Es que eres tonto. Terminó de decirse a si mismo al llegar al apartamento.

Una vez allí, simplemente se encerró en el baño para ducharse y verse luego con Charles.

M moría d ilusión por traer este fic lo juro, muchísimas gracias por leerlo <33