Mi Héroe, Papá [Bluey]

Viaje en auto

Estaba confundida, recuerdo estarlo. Recuerdo a Bingo cantando algo que no recuerdo muy bien, ella estaba feliz, llevaba un peluche en sus brazos. Papá no estaba haciendo bromas ni tampoco jugando con nosotras, era raro que no lo hiciera, aun cuando íbamos en el auto, mas bien parecía asustado, alerta, viendo hacia los lados en cada momento.

- ¿Sucede algo, papá? - pregunté.

- No peque, supongo que te lo explicaré luego, cuando estemos en el lugar - me respondió con un tono calmado pero a la vez con la voz quebrada, con miedo; podría comparar ese miedo con el miedo que me daban las arañas o haber visto algo en algún video que me hubiese asustado pero era algo... diferente.

- ¿Nos llevas al parque, papi? - preguntó Bingo.

- ¡Sí, el parque! - dije entusiasmada, aunque algo en mi pequeña alma me decía que al parque no era ese lugar que papi mencionaba.

- No cariño, no vamos al parque - dijo - me gustaría que fuera así.

No tenía mucha idea de cuánto tiempo eran 10 minutos, ese día fueron una eternidad, mi cuerpo y mi mente se sentían extraños, papá no quería hablar, yo tampoco quería hacerlo y Bingo hablaba de más, con su peluche, pero lo hacía. Cuando la eternidad terminó por fin, papá llegó a un estacionamiento muy grande, no estaba segura de dónde estábamos.

- Papi ¿Dónde estamos? - preguntamos Bingo y yo, las dos al mismo tiempo, era un estacionamiento extenso, más grande que el del centro comercial, un edificio muy grande al fondo ¿qué era ese lugar?

- Niñas, - papá suspiró - su mamá tuvo un accidente mientras volvía del trabajo...

- ¿Mamá manchó sus pantalones? - dijo Bingo, y yo reí, era gracioso en ese momento, recuerdo haber visto una sonrisita en la cara de papi, pero rápidamente dejó de estar ahí.

- No peque, es algo peor que eso, por eso quiero que sean obedientes y pacientes, yo sé que ustedes dos son mis angelitos, sé que se portan muy bien pero porfavor no se asusten ni se alarmen, todo va a estar bien. Tengo que ver a su mami ¿si?

- ¿Y si esperas y yo la veo primero? - dije, competitiva.

- La verás cuando nos aseguremos que todo esté bien, el tío Stripe viene en camino, él cuidará de ustedes mientras yo me aseguro de que puedas verla, pequeña - me dijo, su voz me dio paz, siempre me ha dado paz.

Papá bajó del auto, bajó a Bingo y me bajó a mí luego, nos puso unos ponchos para no mojarnos, él no usó ninguno, llovía. Caminamos hasta llegar al gran edificio, Bingo siempre era tan feliz, esperanzadora, me calmó, al menos en ese momento. Iba brincando en charcos de lluvia de la entrada, limpió sus patitas en la alfombra de lo que creo era una recepción, al entrar, todo olía extraño, todo era color blanco, no se veía tan mal como se planteaba.

- Hola, buenas tardes, estoy buscando a Chilli Heeler, me dijeron que la habían traído aquí hace algunos minutos, ¿podría decirme dónde está? - preguntó papá, lo decía calmado, pero sabía que estaba agitado, aunque mi padre no solía alarmarse para no asustarnos a ambas.

- Oh ¿usted es su esposo? - preguntó la señorita detrás del escritorio, con una pila de papeles en él.

- Lo soy, soy Bandit Heeler y ellas son mis pequeñas, Bluey y Bingo Heeler - papá nos sonrió - ¡saluden niñas! - ambas ladramos felizmente.

- Hola chiquitas, que lindas, - dijo ella viéndonos, con una sonrisa amistosa - en un momento alguien lo llevará dónde está su esposa, aunque déjeme decirle que sus pequeñas no pueden ir con usted, pero ¡no se preocupe! Ellas pueden ir a jugar a la sala de espera.

- Su tío vendrá a cuidarlas mientras yo no pueda, así que de eso no hay cuidado - dijo papá, viéndonos a ambas con esa sonrisa tímida.

Todos fuimos a la sala de espera, habían muchos juguetes y algunos otros niños - Papi, ¿mami estará bien? - preguntó Bingo, un poco asustada, creo que ya estaba asimilando la situación. También yo lo estaba haciendo, accidente, pequeño o no, es un accidente y el miedo de no saber qué tan grande era me asustaba aún más.

- Sin duda peque, yo espero que así sea - despeinó nuestro pelaje y sonrió. No me olvido de eso, estaba asustada, pero papá sabía cómo poner todo en calma.

De pronto un doctor se acercó a papá, le dijo unas palabras que no recuerdo muy bien, nada que me alarmara, de haber sido así lo hubiese recordado; el tío Stripe apareció tan de repente que no sentí cuando nos cargó a ambas, a Bingo y a mí, saludando muy alegremente, aunque si me lo hubieran preguntado, diría que también se le veía asustado. Bingo se alegró de verle y yo hice lo mismo. Habló con papá.

Y papá se fue. Se despidió de ambas y desapareció entre pasillos blancos. Y si también me hubieran dicho que en horas todo como lo conocía iba a cambiar no lo hubiera creído.

𖡼.𖥧.𖤣𖥧𓆏𖡼.𖤣𖥧𖡼

Hola a todos, este solamente es el primer capitulo de lo que espero sean necesarios para completar esta historia, espero que sea complemente de su agrado y en donde quiera que estén tengan una linda tarde, noche o mañana ♡