solo una

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GAVI

Había llegado a mi casa después de dejar a Ava en la suya, habíamos salido a comer y la pasamos muy bien.
Unos minutos después recibí una llamada, era Pedri.

- Hola hermanito, tengo una fiesta hoy ¿Vendrás?

- Llevaré a Ava. - escuché como se reía un poco detras de la pantalla.

- Siempre supe que te gustaba.

- Calla, ¿a qué hora es?

- Ven como a las diez y media o a las 11, vendran Joao, Vini y Eric ten cuidado que no te roben a tu chica.

- Tonterías, nos vemos. - colgué la llamada para luego volver a llamar a Ava.

- Joder Pablo acabas de dejarme en casa ¿Que nesesitas?

- Si, hola, estoy bien claro ¿Y tú cómo estás?- obviamente estaba siendo sarcástico.

- ¿Que pasa ahora? - Pregunto otra vez.

- Vamos a la fiesta de Pedri hoy.

- Vale, a qué hora pasas a recogerme?

- Cómo a las diez y media.

- Mientras voy a dormir, adeu Pablito. - y fue ella la que cortó la llamada está vez.
¿Pablito? Me gustaba que me llamé así.

AVA

10;11 PM
¿Quien se duerme hasta las 10:11 PM?
Dios, tengo que cambiar mis hábitos.
Estaba llegando tarde a la fiesta de Pedri.
Me puse un vestido rosa corto junto a unas botas texanas blancas. Cuando termine de vestirme ví que Gavi ya me estaba marcando.

- ¿Hola? - dijo detrás de la pantalla.

- Ya estoy lista.

- Y yo esperándote abajo, venga que ya estamos llegando tarde.

- ¿En serio? Ya voy.
Baje hasta abajo donde estaban Asia y Dan todavía viendo la televisión.

- ¿A dónde vas tan tarde?- preguntó Dan

- La verdadera pregunta es ¿Que hacen ustedes todavía despiertos?

- ¿Te estás escapando? - pregunto Asia.

- No, ya me tengo que ir, nos vemos. - digo para luego salir y encontrarme con Pablo recostado por su coche mirando su teléfono. Cuando sintió que estaba ahí alzo la cabeza y Vi como una sonrisa se formaba en sus labios mientras me miraba de arriba a abajo.

- La vista al frente, Pablo. - reí.

- Cómo si hubiera algo para mirar, vámonos ya.

- Vámonos, Amigo. - me burlé de el.
El entro al coche y yo fui al otro lado para sentarme en el asiento de copiloto.

- Deberías abrirme la puerta.

- No soy tu chófer, linda. - dice para luego encender el coche y irnos.

- ¿No puedes ser más creativo con lo que te vas a poner? - pregunté, siempre llevaba un pantalón y una camisa de color beige o blanco.

Sol, Tierra, Mar y... ¿Amor? | Pablo Gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora