Sombras del pasado

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NARRA MILE.

Sirenas de ambulancias, luces parpadeantes, aturdimiento, de pronto una llamada y de nuevo el silencio se adueña de todo, una lágrima rueda por mi mejilla, confusión, quiero gritar pero no me sale la voz, el teléfono en mi mano choca contra el piso...

- Señor Phakphum? Me escucha? Puede oírme? Está ahí? Señor Phakphum?...

Despierto exaltado, sintiendo un sudor frío recorrer mi piel, la respiración acelerada y el rostro confundido. Hacía tres años que la misma pesadilla se repetía todas las noches. Tanto que incluso empecé a desarrollar temor de dormir, siempre me forzo para mantenerme despierto todo el tiempo posible, cada vez busco una forma diferente de postergar la hora de descanso, y esta noche no había sido diferente, intenté refugiarme en el alcohol para aliviar el peso que me causaba ver la fecha escrita en el calendario. Pero el dolor y los recuerdos no tenían intenciones de dejarme en paz. Cada intento termina conmigo despertando en medio de la madrugada, con el mismo sentimiento de vacío y culpa.

Me dejo caer sobre la silla en la que me terminé quedando dormido y suelto un pesado suspiro. Al mirar el reloj me doy cuenta que está cerca de amanecer, por lo que decido tomar un baño y alistarme para enfrentar este nuevo día. Mi reflejo en el espejo parece juzgarme, como lo ha hecho cada día de estos tres últimos años. Saco un frasco de pastillas del pequeño cajón que se encuentra en el mesón del lavamanos, estas píldoras han sido mis fieles compañeras durante este tiempo, si no fuera por ellas, no lograría mantenerme alerta cada día. Dos son suficientes para despertarme por completo. Me recargo en el lavamanos un poco más de tiempo, dándole la espalda al espejo, y suelto una exhalación antes de continuar con mi rutina.

Hoy, se cumplen exactamente tres años desde que Build se marchó, corrijo, desde que me lo arrebataron. Un conductor ebrio, chocó contra su auto aquella noche, causando que perdiera el control y volcara varias veces sobre la calzada. Cuando recibí la llamada de la policía, solo fue para informarme que había fallecido. Ni siquiera se me permitió identificar su cuerpo, ya que nuestro amor no era suficiente para que las leyes nos reconocieran como una pareja.

Cuando llegué a la morgue, su familia ya estaba ahí. Ellos fueron los encargados de reconocer a Build, o a lo que quedaba de él. Ya que en ese momento me enteré que el auto no solo había volcado, sino que también explotó antes de que alguien pudiera rescatarlo. Su cuerpo calcinado, solo pudo ser identificado por el anillo que se encontraba en su dedo anular. Ese que encajaba con el que se encuentra en el mismo dedo de mi mano izquierda.

Sí, nosotros no solo éramos enamorados, Build y yo estábamos comprometidos. Su familia y la mía no lo aceptaban por completo, pero de todas formas decidimos luchar por lo nuestro. Hicimos un voto de amor cuando le propuse matrimonio, un voto similar al que se hace cuando una pareja se casa de verdad. Pero nunca imaginé que aquello de "hasta que la muerte nos separe", sucedería tan pronto.

Luego de salir del cuarto frío, los padres de Build me dedicaron una mirada, que jamás podré olvidar. Al igual que las palabras que dijo su madre justo antes de desmayarse.

- Espero que tu alma nunca encuentre paz en esta vida. Maldito seas Mile Phakphum. Maldito seas tú y tu apellido. Mataste a mi hijo. Espero que ardas en el infierno.

Por algún motivo su familia me culpó de lo ocurrido. Me escogieron como envase para desahogar su dolor. Tanto que ni siquiera me permitieron despedirme de él. Hicieron su funeral extremamente privado. Cremaron sus restos y de un día para otro, desaparecieron de la ciudad. Esa noche no solo perdí al amor de mi vida, también me quitaron la oportunidad de darle un último adiós. No es extraño que durante los primeros meses, estuve a punto de enloquecer. El dolor se hacía más fuerte con el pasar del tiempo. Mi familia se mantenía siempre al pendiente, incluso temían que llegara hacerme daño. Cuando estaba por terminar el tercer mes de su ausencia, tuve un sueño, fue la única vez en que las pesadillas se interrumpieron. Build apareció en mi sueño, tan radiante como siempre, con esa sonrisa que era capáz de iluminar el mundo entero, fue la última vez en que pude abrazarlo, se sintió tan real. Pero esa fue la noche en que todo cambió. Recuerdo claramente sus palabras.

Mis Recuerdos Por Tu Amor (MileBuild)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora