El Atlante ( saga los medallones kidemona) libro 12.5 + 18

capitulo 14

                      Capítulo 14 

Cuatro meses después...

-!Caty! Ya llegó Hanna. 

-¡Ok! Ahora bajo. 

Gritó Caty desde el segundo piso y bajo rápidamente las escaleras, su amiga estaba radiante con su embarazo avanzado. Y Alister estaba junto con ella. 

-me alegro de verte. - le dió un abrazo - estás hermosa. 

-gracias. - dijo Hanna - apenas puedo andar,no pensé que subirá de peso con el embarazo. 

-también se apuesto muy quisquillosa a veces. - dice Alister y se sentó en el sofá. 

-si no me fastidiaras  todo el tiempo no me pondría así. - se quejó Hanna. 

-te fastidio por qué te amo pulgosa. - le dice Alister,le guiño un ojo. 

Caty sonrió. 

-ay,no sabías que tenías esa vena romántica Alister. - se burló 

-No empieces mujer. - dice Alister algo avergonzando. Aún no se acostumbraba a los afectos de cariño hacia su mujer,y mucho menos delante de los demás. 

-¡Tío Ali! - gritó Rosi bajando de las escaleras. 

-¡Hey! Mi compañera de peli de zombies. - choca la palma con la de Rosi. - ¿Cómo has estado? 

-Un poco triste. - dice la niña. 

-¿Por qué estás triste corazón ? - le preguntó Hanna. 

-Es que extraño a Pietro. - dice la niña. 

Caty miró a Hanna con pena, desde que Pietro se había marchado esa noche, Rosi se había despertado al día siguiente en la mañana buscándolo y Caty no sabía que decirle respecto a su partida. Hasta que le dijo , él se había marchado por asuntos de un trabajo y no sabía cuándo volvería. 

-cariño, ya te dije que Pietro está asuntos de trabajo. 

-eso me dijiste hace días y ya pasaron muchos. - dice la niña - yo quiero verlo. 

-Rosi por qué no vemos esta película que traje, es una de zombies es nueva. - dijo Alister apareciendo una película en su mano para poder cambiar el tema de Pietro. 

El rostro de la niña cambió. 

-¡Si! ¿Podemos verla mamá? 

-si, ve con el tío Ali a la sala. - le dijo Caty y la niña se marchó con Alister. - no duele ver a Rosi así. No deja de preguntar por Pietro todos los días. 

-debe ser duro para ti también - dijo Hanna cuando la acompañó a la cocina. 

-si. No he dejado de pensar en él, si está bien o si le pasó algo..- dijo Caty sentándose en la silla frente a la mesa  y Hanna lo hizo también. -No se que hacer. 

-deberias ir a buscarlo. 

Caty la miro. 

-¿Buscarlo? Para nada, el decio irse por qué así lo decio. 

-pero tú no te quedaste satisfecha con eso o si. 

-claro que no,pero fue su decisión. No podía decirle nada… 

-si le hubieras dicho en ese momento lo que lo amabas él se hubiera quedado a tu lado.  Pero preferiste callar lo que sientes por el bien de ambos. - dijo Hanna - pero no puedes vivir así Caty, tu lo amas debes ir por él a la maldita Atlantida y traerlo.