Lo prohibido detrás de tus besos

Capítulo 26 - Encuentro desafortunado

Sus húmedos labios se apoderan de los míos, es un beso húmedo como el que tantas veces he tenido con él, la adrenalina que me provoca y esa pasión desbordante que hace que lo apriete más hacia mi cuerpo.

Pero de repente se aleja, muy lentamente de mis labios, yo jadeo buscando el oxígeno que necesito.

No...no te vayas, no...

Cada instante lejos de sus labios es como si mi corazón disminuyera su ritmo cardíaco lentamente.

Todo en mí se apaga.

Su mano se aleja de la mía y al levantar la mirada es Jax quien me observa con sus grandes ojos azabache llenos de lágrimas, bajo la mirada de vuelta a su mano que ahora se acerca a mí y la felicidad me invade porque por fin podemos estar juntos así que busco su mirada.

Abro los ojos de golpe, me encuentro en mi habitación oscura buscando el aire desesperadamente. Ya había tenido este tipo de sueños antes, en todos estos sueños se repetía el mismo patrón, Jax y yo éramos felices hasta que él se aleja de mi dejándome sola, siempre algo nos alejaba, nunca podía despertar sintiendo que aunque fuese un sueño no había complicaciones pero este es diferente.

Cuando levanto la vista del primer sueño en el que por fin el regresa a mí no era él, no era su rostro, era...

Santiago.

¿Por qué soñé con él?.

Será una señal de algo.

No entiendo.

—Fue solo un sueño—me digo a mi misma.

Vuelvo a acostarme dispuesta a intentar dormir pero no sé si quiero soñarlo de nuevo, no fue nada agradable o sí ni siquiera lo sé.

Mis párpados se rinden por el sueño y quedo profundamente dormida.

—¿Cómo siguió tu embarazo?.

—Pues bien, no puedo celebrar baby shower ya que muy pocas personas saben sobre mi embarazo.

—Y a mi porque esas cosas no me gustan.

—No puedo creer que estemos embarazadas al mismo tiempo.

—Ni yo, ni siquiera puedo creer que esté embarazada y menos de dos.

—¡¡Qué bonito!!.

—No sé si es bonito pero cada día engordo más y pronto pareceré una pelota.

—Es normal.

—Mjm.

—Hoy en la mañana estuvo Lucy aquí a hablarme sobre el tema del baby shower de las dos.

—¿Qué?. Nah.

—Dijo algo como que, si mis dos mejores amigas están embarazadas al mismo tiempo tenemos que hacer una fiesta doble, te imaginas si fuéramos las tres...y cosas así.

—No se cómo puede desear estar en nuestra situación.

—Cosas de Lucy.

—Ahora es modelo y además su nueva familia tiene dinero, ella insiste en que la fiesta sea preparada por ella.

—¿Y tú qué piensas?.

—Yo pienso que mi hija lo merece pero que tiene que ser algo íntimo porque por nada del mundo Lucas puede enterarse de mi embarazo.

—Si ya sé, eso sería como decírselo a David directamente. Aunque ellos están distanciados.

—Sí, que coincidencia las tres eh.