// En Mí Corazón Y En Mí Cabeza // Charrleo

Tú solo sigue tú corazón...

El menor de quedó callado mirándolo... Esos ojos carmín lo hacían perderse en un mundo de fantasía... Era más que obvio que lo amaba con locura... Pero no se podía decir lo mismo con él mayor... Él no sabía nada de los sentimientos de Leo y creía fielmente de qué un demonio, no era capaz de amar... Y menos a un hombre.

Charro: San Juan, qué haces aquí? *Cuestionó el mayor mientras dejaba la guitarra de lado*

Leo: ... *Le miró leve* Paseando... *Se acercó hasta sentarse al lado del mayor* Y tú?

Charro: mmm... Sabes que son las dos y media de la madrugada, verdad? Quién carajos sale a pasear a esta hora? *dijo mientras miraba la luna* Acaso me estás siguiendo?

Leo: Claro que no, simplemente no podía dormir y decidí salir a caminar... Y pues me topé contigo, es todo

Charro: sí esté es algún intento para recuperar tus poderes no va a funcionar *dijo para verlo a los ojos*

Leo: ... No es eso... Aún que me gustaría tenerlos de nuevo *dijo ya resignado* Podrías hacerme un favor? *Dijo para verlo*

Charro: Ya salió el peine *dijo para levantarse*

Leo: No, no es nada fuera de otro mundo *dijo sujetando su mano* solo quiero que me cuentes... Que paso realmente... Conmigo... con nosotros...

El mayor se quedó callado... Sentía la calidez que provenía de la mano de Leo... En su interior algo estaba comenzando a nacer... Algo que ya había olvidado hace mucho, pero mucho tiempo...

Charro: *se soltó el agarré disimulando* Enserio no te acuerdas de nada? *Dijo interrogando al menor*

Leo: No... No lo recuerdo *dijo para ver el suelo* Por eso quiero que me digas que pasó...

Charro: mmm... *Tomó asiento un poco lejos del menor* Estabas en la hacienda... Después de caer en mí trampa estábamos solos... En la habitación de destilación, charlamos un rato hasta que te poseí *miró leve la luna* Luego de unos cinco minutos tus amigos lograron expulsarme de tú cuerpo *le mirá* Perdiste tus poderes en el acto y te sacaron del Inframundo, mientras tus amiguitos se quedaron para hacerse los héroes, cosa que es absurda nadie puede contra mí y después... Ya no supe más de tí, hasta ahora San Juan

Leo: *tenía la mirada perdida en el suelo* ...  Y- ya veo...

Charro: Por qué no recuerdas nada? *Cuestionó al menor mirándolo fijamente*

Leo: No lo sé... *Le miró leve* Simplemente es como sí mí mente hubiera creado una alucinación... En dónde yo... Aún tengo mis poderes... A mis amigos... a mis hijos...Y a tí... *Dijo lo último en un susurro que no fue audible para el mayor*

Charro: mmm... *Se llevó la mano a la nuca* bueno, eso no es algo que me interese *dijo levantándose* Ya es tarde, vete a casa muchacho

Leo: *Le miró y se levantó* Oye, pero aún es temprano, por qué no vamos a caminar?

Charro: a ver... A ver Chamaco *dijo cruzándose de brazos* Una cosa es tener una charla... Y la otra muy diferente es qu-

Leo: Por favor *dijo mirándolo* Solo será un rato sí?

El mayor no dijo nada al principio... Simplemente le miró directamente a los ojos... La mirada de Leo era... Dulce... El Charro no tuvo el coraje para negarse a la petición del menor... Pero ¿qué podría pasar? Fue lo que se dijo así mismo, después de todo era solo un paseo... Nada del otro mundo.

Charro: Uhg... Bien *dijo para apartar la mirada*

Leo: Sí! *Dijo emocionado para levantarse*

Charro: no entiendo porque haces esto *dijo para comenzar a caminar*