Alive [hyunin]

3

-Felix¿podrías dejarme solo un momento? -preguntó el castaño con duda.

-¿Estás seguro?

-Sip -afirmó mostrándole una leve sonrisa.

-De acuerdo -aceptó el rubio -solo quédate sentado aquí, debajo de este hermoso árbol que.

-Felix.

-Está bien- dijo poniéndose de pie- yo iré por un hot dog, ¿tú quieres?

-No tengo hambre- dijo Jeongin.

-De acuerdo, ya vengo -sin más, Felix se alejó lentamente.

El castaño vio como su amigo se alejaba por lo que observó a todos lados en busca de algo.

Inhalando el aire fresco se acomodó en una posición parecida a la flor de loto.

Se quedó mirando a la nada, pensando en el chico de la noche pasada cuando de pronto sintió algo frío en su rodilla, al bajar la mirada vio a un tierno cachorrito.

Jeongin levantó al perrito y lo puso en su regazo dándole suaves caricias a lo largo de su cabeza y sus orejas.

-Que bonito eres-arrulló con voz suave-eres un travieso, ¿dónde está tu dueño?

-Cómo te atreves a huir de mí? -preguntó el pelinegro tratando de recuperar el aliento.

-Perdón?-dijo Jeongin luciendo desconcertado.

-Se lo decía al cachorro fugitivo -aclaró Hyunjin con una sonrisa.

-Lo siento-manifestó soltando una risa- entonces es tuyo- poniéndose de pie con el perrito en brazos -él vino hacía acá, no creas que trate de robarlo.

-Descuida, fue mi culpa, o más bien, fue culpa de mi estúpido amigo- explicó-oye creo que te conozco, tu rostro se me hace conocido.

-Uh... Si, creo que fue ayer, en el karaoke, yo.. Te escuché cantando -confesó el castaño con las mejillas sonrojadas

- Eh.. Toma, creo que este amiguito es tuyo -entregándole al perrito.

-Si, lo recuerdo- dijo tomando al animalito en brazos- gracias.

-Y ¿cómo se llama?-quiso saber.

-Aún no tiene nombre- dijo con una sonrisa.

-Entonces supongo que lo compraste recientemente-comentó- es muy hermoso.

-Si, ah... ¿viniste con alguien?, quiero decir, seguro que estás ocupado y yo no quiero hacerte perder el tiempo.

-De hecho si, vine con mí amigo, pero quería estar solo- manifestó Jeongin - y no es una indirecta.

-Quieres un helado?-cuestionó de repente-por
agradecimiento, claro.

-De acuerdo aceptó-solo sí es de chirimoya. Y no me juzgues por no elegir el de chocolate.

-No, para nada, es más, aquí entre nos, yo amo el helado de chirimoya -susurro con una sonrisa.

[...]

-Lix, lo volví a ver -dijo Jeongin desde su lugar en el sofá de la sala.

-¿A quién?-preguntó con duda-¿a Sam?

-No estoy loco Felix, sé que Sam no volverá nunca -mencionó encogiéndose de hombros-¿sabes?, ni siquiera sé cómo se llama ese chico que se parece a Sam.

-Estás seguro?

-Sip, no le pregunté su nombre -manifestó.

-No, me refiero a que si estás seguro de que es parecido a Sam -quiso saber el rubio.