En el corazón de Sandy •TERMINADA•

SEIS: Entre el recuerdo y las fantasías

¡Hola, amores!

Rápida notita para agradecer el apoyo que le están dando a la novela de Sandy, me encanta leer sus comentarios y saber que les emociona tanto como a mí este proyecto ♥ 

Estoy terminando de editarla, pero una vez la tenga toda editada, empezaré a actualizar con más frecuencia, ya les estaré avisando. 

Pd: al final les dejo algo bonito ♥

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CAPÍTULO 6
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Mau

La sangre en mis venas corre un poquito más rápido de lo normal; una mezcla de felicidad y licor me obligan a sonreír sin detenerme hasta que me duelen las mejillas.

Tengo el vago recuerdo de que hace unos pocos minutos una mano femenina tomó la mía y me haló a la pista de baile, me cuesta retener todos los cuadros de cómo llegué acá, pero no me importa mucho. Estoy bailando, estoy sudando, estoy feliz.

A solo unos pasos está Samuel, el amigo con quien vine, también bailando con una chica que jamás había visto en mi vida. Su gesto es reflejo del mío y recuerdo que por eso me gusta salir con él: nuestras energías son similares y siempre nos divertimos mucho.

La mujer frente a mí tiene una copa en la mano, con la otra agarra mi cuello. Su cuerpo se mueve al ritmo del mío, pero tiene sus ojos mayormente cerrados, quizás solo disfrutando del momento, como yo, sin importar con quien.

No sé en qué momento sucede, pero de repente siento unos labios besando los míos. Me toma unos segundos caer en cuenta de que es un beso y de que es conmigo. El instinto de mi cuerpo es responderlo y ya que mi mente va mucho más lenta que el resto de mí, lo hago.

Cuando cierro los ojos, sin embargo, veo a Sandy.

Así, como una bofetada, su imagen llega a mi mente. También el recuerdo de cuando me besó, de esos segundos en que nuestra amistad pareció romperse por completo.

Fue en noviembre, hace unos tres meses; habíamos hecho un viaje de amigos: mi hermana, sus cuatro amigas incluida Sandy, Samuel y otros amigos de ellas. La casa donde nos quedamos era pequeña así que sorteamos los espacios disponibles y Sandy quedó en la misma cama y habitación que yo. No fue raro; Sandy se ha quedado muchas veces en nuestra casa con mi hermana, a veces los tres amanecemos en los sofás de la sala tras ver películas toda la noche. No es nada nuevo.

Las primeras noches allí discutimos porque yo me muevo mucho para dormir y la despertaba a ella en mitad de su sueño; estaba completamente inconsciente y le pedía disculpas. Luego ella empezó a despertarme también para que al menos yo tampoco durmiera bien; batallas entre amigos, normal.

Entonces, una noche, todos en la casa bebimos un poco. Jugamos, reímos, hicimos karaoke y llegó la hora de dormir. Ella se acostó en el lado que daba a la pared, como todas las noches; se quedó dormida primero que yo. La desperté de nuevo al moverme en sueños, esta vez se enojó y me empujó, me dijo que durmiera en el suelo.

Su tono era quejumbroso y casi caprichoso, lo que me hizo reír. Me estaba empujando y yo me echaba más hacia la cama para no caerme, riendo. Ella me echaba con las plantas de sus pies contra mi espalda y yo los tomé, le hice cosquillas y me los quité de encima. Sandy se arrodilló sobre la cama para tener mejor fuerza y yo la enfrenté, riendo, en total contraste con su seriedad mortal.