Blue Door {Klaus Mikaelson}

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VIDA PASADA

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"La reencarnación es algo complejo en lo que no muchos creen. Algunos piensan que en esta vida eres humano, en la siguiente puedes ser una mariposa y en la próxima, humano nuevamente"

No se sabe si la reencarnación es verdadera, mucho menos cuanto tardarás en reencarnar en otro cuerpo, sea la especie que sea... Si es que reencarnarás"

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"Tal vez me conociste en una de mis vidas pasadas, pero no me notaste"

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La verdadera pregunta es... ¿Cuánto tardaran las almas gemelas en reencontrarse gracias a la reencarnación?

Tal vez el universo hizo esperar tanto a Elijah Mikaelson por haber sido tan idiota la primera vez que la conoció.

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—Es tan hermosa... —Dijo el joven Elijah viendo a la hermosa Tatia, que solo caminaba llevando las jarras de agua, pero ese era un espectáculo fascinante para él.

—Sabes que está casada, ¿No es verdad? —Contestó su hermano mayor Finn, rodando los ojos.

—Algún día tendré la oportunidad. —Las dulces ilusiones de un adolescente enamorado, esas palabras no eran más que eso.

Tatia a los ojos de Elijah era la mujer más bella de la aldea, la única mujer perfecta para él. No le importaba que fuera varios años mayor, tampoco que estuviera casada, ella era su único amor.

—Mejor vamos. Padre se molestará si llegamos tarde. —Le recordó Finn levantándose, después de un golpe obligó a su hermano a también hacerlo.

Elijah de mala gana acompañó a Finn al centro de la aldea donde su padre peleaba con espada contra su hermano pequeño Niklaus.

Un corte en la mejilla y otro en el costado del pequeño rubio fue suficiente para hacerlo caer al suelo. Toda la aldea hizo un circulo alrededor de la escena, incluida su madre Esther, quien estaba acompañada del pequeño Kol y sujetaba en sus brazos a la pequeña Rebekah.

—Eres una deshonra, chico. —Dijo Mikael antes de darle una fuerte patada al niño, el cual se retorció de dolor. —Eres lo peor que pudo haber llegado a la tierra. —Y otra patada.

Elijah deseó intervenir, pero su hermano Finn lo sujetó del brazo para evitarlo.

Cuando Mikael estaba por darle otra patada al pobre niño una voz se alzó, indignada y potente.

—¡Basta, es un niño! —Gritó la femenina voz y todos giraron a ver quién había sido.

Elijah la reconoció como Iris, la hija de uno de los guerreros fallecidos en guerra. Cabello rubio, ojos verdes y piel blanca como la nieve, era hermosa y solo dos años menor que Elijah. Pero nadie podía ser más bella que su encantadora Tatia.

—¡Es mi hijo! —Gritó Mikael y le dio la patada al pobre Niklaus, quien finalmente comenzó a llorar como el niño que era. —Le haré un favor al mundo... —Levantó la espada, dispuesto a matar al pobre y convaleciente pequeño.