Spreen se encontraba acostado en su cama tapado asta la nariz, el se encontraba algo frustrado por su celo y más por se suponía que hoy iba abrir la polleria pero tuvo que posponer por la culpa del celo aunque el se puede controlar muy fácilmente no quería molestar a los otros híbrido que pudieran oler su aroma
Cuando escucho que tocaban la puerta, maldijo por tener que levantarse y sin importar quién fuera si no era una buena razón para levántare lo golpiaria y le desearía todo lo malo
Fue a abrir la puerta y se encontró a mariana con una cara de preocupación
-eh hola wacho- dijo spreen, spreen tenia aparecía bastante desagradable estaba bastante sudado y con una cara muy de cansancio
-hola, mayichi me pidió que te llevara esto-dijo mariana sacudiendo una bolsa de plástico
Eran unas pastillas y otras cosas para el celo, Mayichi era la que siempre vendía esas cosas para el celo a el y a los otros híbrido que hay en los pueblos
-gracias!- dijo spreen casi gritado pues a este le daba bastante pena que otros supieran que estaba en celo, pero no había por qué preocuparse ¿no? después de todo mariana es humano el no tenía por qué saber que es el celo
-te encuentras bien?- pregunto mariana al ver a spreen su aparecía y a las reacciones que este tenía no eran las normales
-si solo estoy algo enfermo- dijo spreen desviando la mirada pues este claro estaba mintiendo
-pero la inauguración de la polleria es para la semana que viene- dijo mariana mirado a spreen- no puedes inaugurar la polleria enfermo-dijo mariana subiendo el tono de voz
‐creo que puedo estar bien-dijo spreen intentando no dejar pasar a mariana a su casa
-No te preocupes spreen yo me se un truco para que no estés enfermo para la próxima semana- dijo mariana mirado a spreen- ahorita vuelvo tengo que ir por lo necesario- dijo mariana saliendo corriendo del lugar
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Ahora spreen se encontraba en su sillón viendo como mariana estaba haciendo un "caldo de pollo" para que no se sintiera mal, sin tan solo supiera que no esta enfermo si no tenía otra cosa que yo lo estaba dejando sin sus cinco sentidos
Mariana no ayudaba en nada solo hacía que sintiera más la necesidad de querer darle como cajón que no cierra
Por el otro lado mariana se encontraba haciendo un famoso caldo de pollo para spreen pues este se le veía bastante enfermo así que con el caldo de pollo haría que se sintiera mejor, cuando ya estaba listo lo sirvió y se lo llevó a spreen
-aqui tienes!-dijo mariana poniendo el plato en mesita que esta enfrente del sillón
Mariana se sentó a lado de spreen y este se dispuso a comer el caldo, mariana solo se le quedaba viendo
