[Extra Maitora] No te voy a contar eso.

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ME OLVIDÉ POR COMPLETO QUE TAMBIÉN IBA A SUBIR EL EXTRA DE ESTA ACTUALIZACIÓN 😭😭😭

Igual que el anterior, no tiene relevancia en la trama principal. Solo es Manjiro intentando descifrar sus propios sentimientos después de ver los del BajiFuyu.

Darle clases a Baji fue un verdadero dolor de cabeza

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Darle clases a Baji fue un verdadero dolor de cabeza. Y escucharlo hablar de Chifuyu por todo el resto de la tarde. Kazutora solo podía suspirar con fastidio, aguantando las ganas de decirle que se fuera a la mierda, si le sobraban suficientes neuronas para pregonar por su noviecito, mejor debía aprovecharlas para dar otro repaso. Aunque le había explicado de la forma más didáctica que pudo, todavía no parecía que quedará claro hacia dónde se iba la X en cada ecuación para despejarla.

Luego de abandonarlo a su suerte - porque al parecer tenía una cita con el mismo rubio más tarde -, decidió vagabundear un poco por la ciudad.

La semana anterior había ocurrido un conflicto algo fuerte en casa. Después de la discusión de pareja habitual, a la que ya se había mas qué acostumbrado, su padre rompió el florero al centro de la mesa, luego de tirarla de una patada en un ataque de rabia. Su madre apenas pudo cubrirse con ambos brazos en el suelo para que la cerámica rota no pudiera herirla.

Él había observado todo, no dentro del núcleo del problema, pero si a la distancia suficiente para no perderse ningún detalle. Cuando su padre vio la mirada dorada, un poco asustada, un poco molesta, tomó la maleta del trabajo y salió de casa dando un fuerte golpe a la puerta.

No había vuelto a verlo después de eso. Pero por las conversaciones que había escuchado a escondidas de su madre, parecía que ambos habían comenzado los tramites para un divorcio legal.

Fue más fácil de lo que esperaba asumir la realidad. El juego nefasto de pretender que eran un hogar feliz finalmente terminaba. Su familia, que ya estaba fragmentada, ahora estaba rota.

Quiso verle el lado bueno al asunto, su madre, con tantas cosas que hacer en el asunto legal de la separación, finalmente había levantado todas esas estúpidas restricciones bajo las que había estado viviendo antes. Nuevamente tenía esa libertad para salir y divertirse, para meterse en problemas, para ver a sus muchachos.

El sinfín de actividades por hacer y lugares por recorrer lo habían mantenido lo suficientemente ocupado para superar pronto cualquier herida emocional que sus padres hubieran causado nuevamente en él.

Entre sus destinos para esa tarde, se le pasó por la cabeza visitar el Dojo. Había escuchado por Baji que para no perjudicar los estudios académicos, el Abuelo Sano siempre les brindaba la semana de exámenes finales como un descanso "no tan" obligatorio. Si tenías tiempo y energía, siempre podías acudir a entrenar. Si necesitabas el tiempo para estudiar, eras libre de tomarlo. Parecía una cláusula bastante amable para la rigidez y constancia con la que se manejaban los asuntos de la familia Sano.

Dulce infancia [Bajifuyu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora