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Musutafu, 結むす田た府ふ, Japón.
Mi nombre real es Mai Nakamura y soy a quien llaman con frecuencia 'La portadora'.
Vivo en un mundo rodeado de quirks, en donde tienes que tener uno para ser aceptado en la sociedad y no sufrir bullyng o discriminación. Yo no tengo uno, nací sin quirk, pero jamas sufri desprecio.
Ya que soy la portadora de un demonio.
¿Han escuchado de la leyenda japonesa,
'Gashadokuro'?
Se dice que; es un monstruo japones que forma parte de las leyendas más ancestrales. Se trata de una criatura con forma de esqueleto, que nacio de un samurái que fue injustamente asesinado por rebelarse contra el gobierno. Su hija lo resucitó, y todavía vaga en busca de venganza dentro del cuerpo de una joven. La magia de este monstruo es tan grande que se levanta cada cierto tiempo causando grandes desgracias.
Es un monstruo que suele atacar a los vivos para alimentarse de sus cuerpos, llenandose de las energía negativa para hacerse más y más grande cada vez.
Buen resumen, ¿No crees?
Verán, desde pequeña... unos 7 años? no recuerdo el como Gashadokuro o como yo lo llamo, 'chupa pico' entro en mi cuerpo. Recuerdo que me había escapado de mi casa para ir a las fronteras y ver los fuegos artificiales cerca de un cerezo lleno de césped largos. Comencé a vomitar sangre y de ahí comencé a verlo.
El mayormente duerme, siento su presencia calmada, pero cuando es hora de comer el necesita de sus energías negativas.
Con el pasar de los años teniendo al chupa pico dentro de mi, me e acostumbrado a su carga, su presencia maldita, mi cuerpo más pesado. y el se ajusto a mi vida, ya no come humanos pero si se tiene que alimentar con las auras o también me afectará.
No me gusta entrar en detalle sobre mi pasado, es complicado y me da pereza.
Pero... a los 17 años comencé a entrar en el mundo de lo ilegal. Al escaparme de los heroes comenzaron a buscarme desesperadamente. ¿Gracioso no? El que me escapara fue por aburrimiento, necesitaba ir a tomar auras negativas. Que lugar más negativo que los cacinos, clubes, etc. El ganarle en un juego, hacerlos enojar, tomar de sus impurezas, sucias, limpias, vengativas, no me importaba, me alimentaba. Mientras más fuerte el rencor, más me divertía.
