▪Prólogo▪

174 14 6
                                    


Tan solo estaban ellos dos. Nadie más...



Ella delante de él acostada en su pecho mientras el la rodeaba con sus brazos en la cintura. A la vez, mimos y pequeños besos eran compartidos de el hacia ella.

Quien sonreía felizmente. Ya que era lo que siempre había querido.


En un lugar paradisíaco. Que era su lugar favorito. La playa.

Palmeras por doquier con su respectivos frutos. Distinta y colorida variedad de flores. Unas pequeñas chozas que al parecer fueron edificadas por ellos dos. Para poder vivir en ese lugar tranquilamente.

Lo mejor... era para siempre.


Ya que no había nada que pudiera alterar la paz que ambos gozaban. Ya iban... casi 2 meses juntos viviendo en este lugar.

Y ahora, disfrutaban mirar el cielo azul y escuchar el suave sonido del agua chocando con la y sus pies.


Ella vestía un casual vestido blanco y un sombrero para el sol. El tan solo una camisa manga corta de color blanco y unos pantalones azules.


- Que hermoso- dijo ella mientras miraba el paisaje de todos los días.


El la miró mientras besó su cabeza tiernamente.

- Como tú...



Ella con una sonrisa le dio un suave beso en sus labios. Pudo ser leve pero... decidieron que durara lo que tenga durar. Nadie podía molestarlos ni nadie los podía interrumpir.

Ya luego del beso, se abrazaron más fuerte que antes mientras una suave brisa los acarició.



- ¿Que harás de cenar hoy?





- ¿Ya tienes hambre linda?



- No pero... me da curiosidad. Además bien sabes que amo tu comida amor.




- Bueno. Hay muchas recetas que tuve en mente pero no las hice de momento. ¿Te molestaría si hoy hago innovación?

Ella negó con su cabeza.


- Para nada amor.



- ¿En serio?, mira que como es la primera vez, puede que salga horrible.


- Nah, ¿cuándo has hecho algo horrible?, además sabes muy bien que por más que hayan mejores cocineros que tú... te preferiré más a tí siempre.


- Es bueno saberlo...


Ambos rieron levemente. Pero en ese momento, dejaron de mirar el mar y el cielo. Algo les había llamado la atención. Que hizo que olvidaran lo que iban a decir a continuación. Justo al lado de ellos. Apareció una tercera persona.

Una chica. Vestida de un simple vestido blanco, cabello morado muy oscuro suelto. Y ojos del mismo color.

Ambos comprendieron que como la chica estaba descalza y la arena absorbía todo el ruido, no se percataron de su presencia.


La chica, era hermosa.

Claro, su expresión su mirada, transmitían todo lo contrario.

Miedo. Odio. Ira. Cosas que ella siempre sintió.



Primero lo miró a él... y un sentimiento nostálgico brotó en ella. Era igual que aquel humano. Pero... ella sabía pefectamente, que no era él. Así que su mirada pasó a la de ella.



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 10, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Date a Live: Colapso Espiritual.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora