capitulo 30

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"¡Vamos niddie!" chillo la pelinegra.

Ambas estaban en el lago, no había nadie más y disfrutaban de la compañía de la otra. Merlina estaba flotando mientras observaba a enid caminar por el pequeño muelle de madera, para después realizar un perfecto clavado y sumergirse en el agua.

"¡Sii!" exclamo wednesday, nadando hasta donde sinclair se encontraba "Eso estuvo muy bien" sonrió la pelinegra, rodeando los hombros de la rubia.

Enid suspiro y beso a la pelinegra, acariciando la piel desnuda de su novia. A la rubia le encantaba ver a su chica en traje de baño, sin duda era un gran espectáculo, y a la pelinegra le gustaba complacer a su linda sinclair.

"Te amo" susurro enid, dejando un
beso en la mejilla de su novia.

"Yo también" sonrió Wednesday "Te amo mucho"

"Me encanta escucharte decirlo"
Confeso la rubia.

"¿Ah, si?" pregunto la pelinegra, sonriendo picaramente y empezando a dejar besos en el cuello de la rubia.

"Si" suspiro enid, temblando levemente por las caricias de su novia.

"Pues lo escucharas muy seguido
¿lo sabes?... Te amo mucho gatito"

"Yo te amo más, cara mía" susurro la
Rubia, gimiendo levemente ante
el tacto de su pelinegra.

Wednesday sintió la pequeña erección de enid chocar contra su cadera y no pudo evitar gemir satisfecha al reconocer que ella era la causante de aquello.

"Inid..." susurro la pelinegra, moviendo su mano hasta la erección de su novia, acariciándola.

"Meloncita..." la voz de la castaña
tembló ante la excitación.

"Vamos a la cabaña, nid" pidió la ojinegro "Por favor, amor" jadeo, sin dejar de acariciar a enid.

"Yo... Wends ¿estas segura?"
pregunto, sintiendo como los
bóxers le apretaban demasiado.

"Estoy muy segura cariño" sonrió
coquetamente "Aprovechemos que estamos solas, y lejos de todos" dijo wednesday.

"Merlina..." Calle suspiro tras sentir
el leve apretón de su novia en su
entrepierna.

"Vamos" merlina sonrió y se separó de su novia, nadando hasta la orilla.

Enid sonrió, mirando descaradamente el cuerpo de su novia. Su erección era casi insoportable y aquella pelinegra la esperaba para poder ayudarla con su pequeño problema.

"Nidi, estoy esperándote" susurro seductoramente la pelinegra desde la orilla del lago.

Sinclair asintió embobada, fijando sus ojos en el suave movimiento de la pelinegra al caminar. Sus ojos se deleitaban con la perfecta figura de su novia y eso solo permitía que su amigo se endureciera y necesitara una ansiada liberación. Wednesday tenía un espléndido cuerpo, su andar era delicado y excitante, su trasero ¡Dios! Enid moría por tocar ese par de hermosas masas tan bien formadas, ella queria tocarlas, acariciarlas, estrujarlas entre sus manos.

Definitivamente, enid no podía creer que eso estaba a punto de suceder, no podía creer que realmente su novia estaba a punto de entregarse a ella.

La ansiedad creció dentro de ella, tenía miedo, miedo a no poder hacerlo bien, miedo a decepcionar a la pelinegra, miedo de perderla si eso no llegaba a funcionar entre ellas. Sinclair tenía miedo, aquellas inseguridades con las que vivió durante tanto tiempo debido a su condición y que la atormentaban, volvieron de golpe, apoderándose de todos sus pensamientos.

Sintió pánico, ella no queria meter la pata, no si eso conllevaba perder a merlina. Enid quería hacer las cosas bien, se moría de ganas por estar con la pelinegra, su miembro moria por sentir la calidez del cuerpo de su novia, pero no sabia cómo hacerlo, ella era muy torpe cuando de la pelinegra se trataba y no quería defraudarla.

ᴇʟʟᴏꜱ ɴᴏ ꜱᴀʙᴇɴ ᴅᴇ ɴᴏꜱᴏᴛʀᴀꜱ [ᴡᴇɴᴄʟᴀɪʀ ɢ!ᴘ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora