Escapando de la realidad

7 4 1
                                    

Los atrapasueños no atrapan las pesadillas... solo las retienen... nunca sabemos cuando volveran a aparecer.

Ya no podía distinguir los sueños de la realidad, todo era un deja vu? O solo mi imaginación?

Las pesadillas comenzaron, era miercoles 10 lo recuerdo bien.
Desde ese día todo eran pesadillas cada noche, llene mi cuarto de atrapasueños pero no funcionaba.

Hasta que un día...

Estaba tranquila en mi escritorio, pensando en todo lo que me había pasado en los ultimos meses, sentí algo arriba, en el techo, cayeron gotas de agua, pero... al fijarme bien... el agua se empezó a tornar de un color rojizo como si tuviera vida.

Por qué siento que esto ya lo he vivido antes - repeti

Miré atonita todo el panorama, todo lo que estaba pasando pero... no sabía lo que pasaba, salí disparada de mi habitacion y no me importaron las miradas preocupadas de mi madre o de mi hermano, subí al techo... quede pasmada, mis piernas me fallaban, no me respondian, quedé atonita por un segundo y todo se torno negro.

Desperté, acostada en mi habitacion, seguro era otra de mis pesadillas- pensé.
Salí, efectivamente nadie me miraba preocupado o extrañado ya estaba acostumbrada a pensar que eran realidad cuando no.

Tocaron la puerta, al abrir me encontré a unos señores de uniforme azul, uno con una planilla en la mano.

Usted es la señorita Ashley Smith? - me pregunto el señor de la plantilla formalmente.

Si, yo soy - respondí

Podría llamar a su madre? - su mirada era de entendimiento, por que?

Llame a mi madre, que estaba pasando?
Firmo la planilla, y me dí cuenta de algo... tenían el uniforme... del psiquiatrico.
Pero cuando sacaron una geringa... ya sabía lo que iba a pasar.

Mamá, que esta pasando? - pregunté asustada.

Es por tu bien cariño - se limitó a responder.

Mi bien? - no entendia nada

Cariño, estaras bien, no te preocupes - dijo poniendome una mano en el hombro - estoy preocupada por ti, tenías un cuerpo en el techo, amor, se que te sientes confundida pero... - suspiro - no te preocupes vale, cas a estar bien.

En ese momento fue en el que entendí que mi sueños no eran sueños.

Deja de decir que voy a estar bien - le grite - deja de decir eso, me quieres internar en un psiquiatrico como una maldita loca - no podía más, lo unico que sentí fueron unas manos que me sujetaban y algo puntiagudo que entrada a mi cuerpo.

Desperté, en una cama que no era la mía, en un cuarto blanco, aburrido y con olor a medicinas, un señor alto, con lentes y bata blanca entró.

Estas bien? - me pregunto formalmente, su mirada era la misma de los que me habían traido.

Como quiere que este bien si estoy en un psiquiatrico ? - remarque la ultima palabra.

Ya se que esto es nuevo, pero estaras bien - se puso a un lado de mi cama.

Todo el mundo me dice eso, como si estuviera loca - quise enojarme pero tenía un poco del sedante todavía en mi cuerpo.

Creo que te pondre un poco de sedate - dijo preparando la geringa.

Se acercó a mi... y me susurró a el oido

Puede que tu cerebro no este bien del todo, pero mi hija necesita un corazón, y tu eres compatible...

Desperté, me sumbaban los oídos, otra pesadilla, me toque el corazón y pude notar... que no estaba latiendo.

Rosa NegraWhere stories live. Discover now