Yalena, era una genio desde temprana edad muy querida por su madre, pero su padre no tanto porque él deseaba un hijo fuerte para poder dirigir su amado observatorio. A pesar del rechazo bastante directo de su padre, fue convencido por su madre para que la educara para dirigir el observatorio, cosa que se mostró escéptico al principio pero después cedió y decidio criarla y "moldearla" a su manera. Era una relación muy tensa para ambas personas, aunque había veces que podían conectar como mirar a las estrellas desde su telescopio o jugar al ajedrez.
Poco a poco se volvió esa clase de persona que esperaba que fuera su hija; una mujer fuerte, inteligente e independiente aunque a base de una crianza dura pero se conformo.
Cuando cumplió la mayoría de edad y estaba lo suficientemente capacitada para poder dirigir el gran observatorio del territorio de la destrucción, llego su primer obstáculo... Necesitaba un marido para codirigir el observatorio. ¿Por qué se preguntarán? Porque el gobierno veía de manera irónica que una sola mujer pudiera con eso, cosa que la ofendió bastante porque según ella podía ser igual de diligente que cualquier hombre pero acepto a regañadientes esa condición del gobierno..
Pero cuando iba a conocer a hombres, le llegó una noticia de su padre... Un hijo de un viejo amigo suyo llamado; Arnold Barton, pidió su mano en matrimonio dejando a Yalena sorprendida y roja por esa noticia...
¿Quien era ese hombre y de que lo conocía Yalena?
Años atrás, su padre empezaba a viajar repetidamente junto a Yalena de unos 16 años, al territorio de lo misterios para pedir ayuda a su viejo amigo, el constructor, Jason Barton, para que pudiera arreglar su observatorio. Y en una de esas visitas, Yalena conoció al joven hijo del invento Jason; Arnold. Un joven genio en construir inventos y alumno de la líder Vanessa Wendells. Yalena al principio sólo se quedaba con él por órdenes de su padre aunque empezo a fascinarse con sus inventos y su gran creatividad hasta que llegó al punto de que se enamoró de él.
Yalena se sorprendió de escuchar al chico que le gustaba desde joven pero a la vez se deprimio un poco, porque pensaba que solamente se lo pidió para así saldar las deudas graves que tenía su familia pero acepto su propuesta porque el gobierno le exigía marido para dirigir el observatorio y también esperaba que él también la amara con el tiempo.
Lo que no sabía, Yalena, es que Arnold también estaba enamorado de ella desde jóvenes y olvidando todo lo que decía su padre del dinero y demás... Cogió valor y le propuso matrimonio, y se alegro de descubrir que ella acepto, aunque igual de deprimido porque pensó que ella acepto para poder dirigir el observatorio.
Ambos se volvieron a reunir para planear su boda y demás. Aunque aun con el corazón dolido porque el otro usará ese matrimonio "blanco" para su beneficio pero felices por poder estar juntos y con el tiempo que el uno se enamore del otro. Pero no fue por un consejo que le dio Gandalf a Arnold que hizo que abriera los ojos y fuera rápido a donde Yalena para tener una conversación sincera con ella donde ambos descubren que sus sentimientos eran mutuos y correspondidos.
Ambos amantes sonrieron para después besarse con pasión en los labios durante unos minutos y al separarse; Arnold rojo como un tomate, le vuelve pedir matrimonio pero esta vez de verdad y Yalena acepta encantada.
