Capítulo 100:

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A partir de ese día simplemente no quise salir de mi cuarto. Alex cada tanto tocaba mi puerta preocupado de que no comía nada, me decía que me haría mal y cosas así. Me tenía sin cuidado.

Bueno, la verdad es que por el resto del día (y medio) iba al baño únicamente cuando sabía que Alex no estaba en casa o que no se enteraría de que iba a ir. No quería cruzarme con él. ¿La comida? Bueno, no vivo sin comida. Estar 3 horas sin comer absolutamente nada comienza a ser una tortura para mi cuerpo por lo que es imposible que no coma nada por 36 horas. ¿Que si comía? ¡Por supuesto!, verán, en mi primera oportunidad en la que Alex estaba encerrado en su cuarto con la música bastante fuerte, bajé con prisa y tratando de no hacer ruido para buscarme toda la comida que pudiera. Me llevé pizza, agua, golosinas, galletas, cereales, todo lo que me pareció indicado y que pudiese cargar en un solo viaje. Por las dudas, todos mis alimentos los escondo debajo de mi cama por si alguien entra cosa que dudo totalmente. Alex respeta muchísimo mi privacidad, tanto que me toca la puerta y me deja la comida junto a esta misma.


Pasados el día y medio escuché el timbre y a Alex bajar. Suspire y me senté en el suelo de mi cuarto apoyando mi espalda en la cama mientras comía algunas papitas fritas. Lo siguiente que escuché fueron unos pasos subir las escaleras, sin duda había alguien con él. ¿Y si era Julieta? ¿Sería capaz de tráela a casa y llevarla a su cuarto?... Supongo que esa duda la tendré por un tiempo más porque la voz de su acompañante no era para nada la de una mujer.


-¿Hace cuánto no sale de su cuarto?

-Casi dos días. Creo que no ha comido nada desde entonces. Le dejo comida en la puerta pero nunca la agarra.

-¿Sabes que le sucede?

-Sí. -Hubo un silencio prolongado entre Alex y Nick. Oculte las papas debajo de la cama y fue cuando escuche la puerta de mi cuarto- ______, ¿Tienes hambre?

-No. -Contesté. Valoraba mucho que se preocupara tanto por mí, a cada rato me pregunta si necesito algo, si quiero hablar, si quiero que me compre algo, si quiero hablar con alguien en particular... Sé que no llamaría a Nick si no fuese porque está realmente preocupado.

-¿Puedo entrar? -No le respondí. Sabe de antemano que la respuesta es no. Se la he gritado unas 20 veces este último tiempo- Estoy con Nick... ¿Quieres hablar con él?

-Váyanse.

-Vamos a entrar...

-¡Te dije que no Alex! -Exclamé enojada. No me gusta que no me hagan caso. Si digo que no, es no.

'Déjame a mí' -Escuché murmurar a Nick. Supongo que Alex le dijo que si o simplemente se fue.

-______... Respóndeme... ¿Quieres que traiga algo para comer?... Si no me respondes voy a entrar.

-Déjame en paz.

-Quiero que hablemos. ¿Podemos hablar?

-No tengo ganas de hablar.

-Vamos, solo un momento... -No le respondí. No quería hablar con él... Bueno, sí. Quería abrazarlo, quería que me estrechase en sus brazos y me aconsejara, quería descargarme pero me daba vergüenza después de lo que pasó la otra noche- Bueno. Voy a entrar.

-¡Te dije que no quiero hablar Nicholas, déjame en...! -La puerta se abrió de par en par dejándome ver como Nick me miraba atento. Alex, al parecer, se había ido a su cuarto dejándolo solo tal y como le pidió. Inmediatamente aparte mi mirada de él para mirar al suelo. Estaba totalmente desalineada y no me agradaba la idea de que me viese así.

Extraño destino ♥ ★ [Nick Jonas y Tu]Where stories live. Discover now