Capitulo 2

38 14 62
                                    


Llegue a casa muy cansada de la fiesta y lo único que hice fue desmaquillarme, ponerme pijama y acostarme a dormir. Era una pena que no haya podido acercarme a Leo, el me gusta desde que lo conozco, hace una semana para ser exactos, cuando Lydia hizo una reunión en su casa y lo ví sentado junto al hermano de ella. Se veía guapísimo con esa camisa blanca y esos pantalones de mezclilla. Junto con Lydia tratamos de todas las formas posibles llamar su atención, desde tirarme a la alberca a propósito y fingir ahogarme para después pedir que me diera primeros auxilios, hasta empujarlo accidentalmente por las escaleras. Lo habíamos intentado, pero tal vez no debí pedirle ayuda a Lydia. Por otro lado, estaba feliz de haber hablado con Evan, parece un gran chico, desde luego es bastante gracioso. Jamás habíamos entablado una conversación tan larga como la de esta noche, por corta que pareciese, nuestras únicas palabras al vernos eran saludos y despedidas.

Estuve un largo rato mirando el techo y cuando me di cuenta ya había caído rendida.

No soñar con nada es lo mejor, estando despierta mi mente parece no guardar silencio, incluso parece odiarme. Por eso disfruto tanto escuchar música, me desconecto de mi mente para intentar comprender la mente de otros. Es gracioso como escucho música para no escuchar a mi atormentada cabeza, y resulta que la cabeza de otros es aún más odiosa.

Rondaba un gran silencio en casa o al menos hasta que sonó la alarma de mamá y las letras de "Sunsetz" comenzaron a sonar. Solté una risita al escuchar la tercera línea, mamá y papá escuchan esta canción desde que empezaron a salir, fue la canción con la que bailaron en su boda y desde ese día se levantan escuchándola. No importa si están enojados, esa canción siempre será suya, siempre les va pertenecer. Papá siempre ha dicho que escuchar esa canción es como revivir todos sus momentos juntos, como viajar al pasado y revivir esos besos, abrazos, caricias y palabras. Yo quiero un amor así, algo eterno, como una montaña rusa que, aunque no sepa cuándo estaré abajo, me dé la seguridad de que no me caeré y siempre volveré arriba.

Es raro como imagino amando a una persona con la misma intensidad, o más, con la que mis padres se aman, pero yo no imagino como alguien podría amarme de la misma forma. Siempre me pregunto si seré merecedora de un amor así, si alguna vez alguien me querrá como yo lo hago, sin complicaciones ni ambigüedades.

Al terminar la canción un gran silencio inundó la casa, escuche como alguien tocaba la puerta de mi habitación y se abría después de decirle que pasara.

—Kira— murmuro una adormilada Hazel con los ojos levemente cerrados por el cansancio, mi hermana se subió a la cama y se arrastró torpemente hacia mi y cuando estuvo lo suficientemente cerca se acostó encima de mi escondiendo su cabeza en mi cuello. Yo pase los brazos alrededor de su cuerpo y cerré los ojos, concentrándome en sus respiraciones pausadas y en el calor de su cuerpo, demasiado adorable, con su mameluco rosado y su chupón del mismo color. Sus mechones rubios ondulados caían sobre mis hombros y pude inhalar el dulce aroma a canela, su olor favorito.

Nos quedamos así un rato, hasta que sentí un peso más sobre mi estomago. Africa empezó a brincar sobre la espalda de Hazel, ladrando de vez en cuando, ella empezó a reír mientras intentaba abrazarlo, cuando lo logro lo empujó hacia ella y ambos quedaron acostados encima de mi. Sonreí ante el pensamiento de que el día había comenzado de una forma maravillosa, con los rayos del sol atravesando la cortina del ventanal. Acaricié a Africa y simplemente escuche como soltaba algo parecido a un ronquido. Hize una lista mental de lo que tenía que hacer hoy; estudiar para química, limpiar mi habitación, terminar la tarea de matemáticas, aprenderme el guión para la obra de teatro y salir con Meghan y Lydia. Solté un suspiro al notar que mi día iba a estar bastante ajetreado y que muy probablemente me tendría que desvelar lo cual suponía un punto en contra porque así no podría concentrarme bien en el examen que tenía a primera hora en la mañana. Hazel me observo con curiosidad al escuchar mi suspiró y se quito el chupete.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Dec 23, 2023 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

SerendipiaWhere stories live. Discover now