Maldito Amor

16

El entró y lo pude notar como serio cerre y le pregunté que pasaba, pero no respondía
— Ey, vidal ¿Te sientes bien te noto raro—
Vidal:— no estoy bien, tienes algo de beber té o café —
— si claro ya te lo preparo un momento —
Mientras montaba la tetera para hacer el té, pude notar como vidal caminaba de un lado a otro, cuando se canso, se paró frente al gran ventanal que estaba al frente de nosotros, y veía como el intenso sol, hacia frente se quitó de allí fue hasta los estantes y leía los nombres de los libros
Vidal:— ju, todavía hay personas que leen poesía, es impresionante de verdad te gusta por lo visto —
El té estuvo y fui a la cocina a apagarlo tome dos tazas y lo serví,
— vidal aquí tienes, ten cuidado está caliente —
Vidal:— muchas gracias —
Me le quedaba viendo y todavía podía notar lo ansioso que se encontraba
— vidal ya me estás asustando, déjate de rodeos y dime de una buena vez que es lo que te pasa —
Vidal se paró se y Voltio hacia a mi
Vidal;—tengo algo que decirte, quiero que me pagues el dinero que me debes—
Eso me sorprendió y me dejó impactada
—Vidal yo,yo en estos momentos no te los puedo pagar pero si me das un poco de tiempo —
Vidal;—no lo quiero ya—
Si soy sinceras jamás pensé que Vidal me cobrará pero supongo que estaba en todo su derecho,  lo que me pareció un poco precipitado fue que lo quisiera para ya,
—Vidal sabes de sobra que en estos momentos no tengo el dinero disponible.—
Vidal;—si no me das el dinero para mañana mismo aré una denuncia—
—¿Denuncia?—
Vidal;—al menos que…—
—Al menos que, ¿que?—
Vidal;—que al cambio del dinero tu…tu aceptes casarte conmigo—
Queeeeeeeeeeee creo que eso me impresionó más que cualquier otra cosa en el mundo, Vidal pidiéndome que me casará con el
¡CARAJO! Vidal no se me hacía indiferente la verdad, pero estaba muy joven no estaba preparada para casarme ni siguiera había cumplido la mayoría de edad, creo que la impresión fue tanta que la taza de té, que tenía en las manos de me resbaló y se partio.
—Lo siento Vidal pero no pienso casarme contigo, es una locura—
pude notar que no le gustó nada lo que le dije
Vidal;—entonces quiero el dinero para mañana mismo o levanto la denuncia—
Se porto déspota y prepotente
Vidal;—tienes hasta las 9 de la mañana para entregarme el dinero—
se dirigió hacia la puerta y la cerro, yo me quedé allí parada tratando de asimilar todo lo que acababa de pasar, y pensando en que diablos iba a hacer, pase toda la noche despierta sin poder dormir, no quería casarme con él, pero tampoco tenía el dinero para pagarle, me encontraba entre la espada y la pare sin salida alguna, atrapada en un laberinto al cuál no le encontraba salida al contrario me perdía más, cada vez, después de mucho rato por fin logré agarrar el sueño y me quedé dormida, a la amanecer me dirigí al apartamento de Vidal, sin estar segura de lo iba a hacer o decir, llegué a la puerta y lo pensé demasiado antes de tocar, pero a la final lo tuve que hacer, el me abrió la puerta se encontraba en toalla, se veía como su abdomen estaba perfectamente marcado quite la mirada y le dije si podía pasar, hizo un gesto y abrió la puerta para que entrara, al entrar me preguntó si tenía, ni siquiera me espero a que pasará, el dinero suspiré y mentalmente me resigne "ACEPTO"
Vidal;—¿Que?—
—eres sordo o te la das, te dije que Acepto casarme contigo,— pude ver cómo sonreía, descarado ni siquiera podía disimular
— aunque no se cómo vas a ser yo soy menor de edad todavía—
Vidal;—tu no te preocupes ya trabajas y te mantienes así que te vas emancipar—
—Bueno por lo visto tienes todo listo falta es que pongas también el día de la boda —
Vidal;—me parece perfecto arreglaré todo para casarnos este fin de semana—
—¿Que? ¿Este fin de semana? Tan pronto, de verdad que estas loco, ¿Cuál es la prisa?—
Vidal;—es que no veo la hora en que seas mi mujer, así que porque esperar tanto—
—¡Tu esposa,…voy a hacer tu esposa no tu mujer grabaste lo desde ya! Recuerda que no me estoy casando por gusto ok—
Vidal se echó a reír más fuerte
Vidal;—si,si claro como quieras igual estarás casada conmigo, aunque por los momentos te encuentres molesta—
Por un momento, No, voy a seguir molesta contigo Desde el momento que me obligues a firmar el maldito papel para ser tu esposa, hasta el día que medes el divorcio, o me muera,
Vidal:— entonces será hasta que la muerte nos separe—
Me moleste un montón, el echo que el que  estuviera burlando de mí, le dije que mantuviera informada y camine hacia la puerta
Vidal;—ey no le quieres dar un beso a tu futuro esposo—
Se estaba burlando maldito imbecil, tome la puerta y antes de salir la lanze