Son Sueños

Prólogo

La luz... La luz molesta

Mareado entrecierra sus ojos por la luz que provenía del techo que aunque tenue hacía estragos en sus dilatadas pupilas por causa de una fuerte droga que le dejó inconsciente por un par de horas

-Vaya, el princeso ya empieza a despertar, buenos días querido- Una chica con un cuchillo miraba fijamente a la víctima

-¿Q-Qué? ¿dónde estoy?- Un poco más consciente de la situación empezaba su cuestionario, pues en 2 segundos ya sabía reconocer la situación que estaba viviendo y no era precisamente bonita

-En el lugar donde estarás por el resto de tu vida, conmigo- Abrió los ojos y dijo eso de una forma tan dulce que era perturbador

-¿Qué quieres de mi?- La víctima aún un poco mareado estaba recuperando su consciencia

-¿Qué que quiero? A ti- Su secuestradora le miraba con obvia locura

- Pues has tenido mala suerte, yo no quiero nada contigo- Desafiante le miró en los ojos mientras le escupía en el zapato

- Uy, míralo, se cree fuerte ¡JA! Este show no te va durar ni un minuto, resígnate a vivir conmigo toda tu vida- Se acercaba peligrosamente con un cuchillo en la mano que le acercaba al cuello

-E-Está bien, hago lo que quieras, discúlpame por lo de antes- El chico miraba atentamente el cuchillo mientras algunas gotas de sangre escurrían por su piel, haciendo un fuerte contraste de una piel pálida con tonos granates

-Ves, no es tan difícil estar conmigo- Le acariciaba la cara mientras que entrecerraba un poco los ojos, tomo un poco de sangre y se lo pasó por la boca y con el mismo dedo lo pasó por los labios del chico -Eres tan dulce, todo es tan dulce de ti- Se acercó al chico dándole un beso que el no correspondió por obvias razones- Vaya ¿no crees que estas siendo un poco arrogante? - Le miraba con enfado mientras poco a poco se cabreaba

-No, no, yo, lo siento- Respondía aterrado intentando aclararlo

-Espera, ¿no será que tienes a alguien?, ¡Cómo te atreves a engañarme! ¿¡ACASO NO SOY SUFICIENTE, CON TODO LO QUE TE AMO!? ¡¡DIME Y NO TE ATREVAS A MENTIRME!!- Enrrabiada tomó el cuchillo y lo zarandeaba de un lado para otro

-¡Noo! ¡No tengo a nadie, solo estas tú!- Intentaba que la chica se relajara

-¡MENTIROSO! ¡Es esa chica peliazul con la que siempre hablas en clase! ¡AGH, Y YO PENSANDO QUE PODÍA CONFIAR EN TI!- La chica empezaba a delirar apuntando con el cuchillo al chico

-¡Relájate, no conozco a ninguna chica peliazul, te digo la verdad!

-¡Deja de mentir, siempre os veo en clase hablando!- Poco a poco la chica se acercaba poniendo el cuchillo en su pecho -Pero da igual, si yo no te puedo tener nadie te tendrá- Con una sonrisa le clavaba poco a poco el cuchillo, sin dejar de mirarlo con una sonrisa

-U-Ugh, pe-pero ni si-siquiera te co-conozco- Empezaba a sangrar su estómago y su boca escupia sangre derramándose en su camisa blanca

-Lügner- decía con una sonrisa mientras le ensartaba más el cuchillo- Estamos en la misma clase- Terminó su agonía dándole una estocada con el cuchillo

Lügner...