Requisito 17: Un reto es un reto

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Dos días después...

—Te dije que íbamos a llegar tarde —repliqué mientras el chófer conducía camino a la casa de los amigos de Killiam.

Según lo que me había comentado mi novio falso, el súper tazón daría inicio el día de mañana; ya habían pasado cuarenta y ocho horas desde nuestra llegada y nuestro altercado en el auto y esa noche en particular habíamos quedado en ir a la fiesta a la cual asistieron varios jugadores y esposas respectivas.

—Eso te pasa por no querer bañarte conmigo señora Hastings. —me acusó con el dedo, haciendo que mis mejillas se colorean de rojo un poco, pues el chófer estaba a solo dos metros de distancia.

—Sabía lo que estabas pensando y por eso salí corriendo por todo el departamento —le recordé nuestra loca travesía antes de venir.

A pesar de que el resto del día estuvimos en entrevistas, entrenamientos y fotógrafos afuera de las instalaciones del estadio no había un momento exacto en el que alguien conocido para Kill se diera cuenta de que si bien era falso el matrimonio ellos solo debían darse cuenta de lo real de nuestra relación y a eso íbamos.

Killiam lo llamó: Convencer al público más difícil; sus mejores amigos de toda la vida.

—Tú solo querías disfrutar de un baño diferente, ya teníamos el compromiso con tus amigos. Sabes que no soy fanática de las tardanzas.

Su cara mostró un poco de satisfacción ante mis palabras y después la cambió a una cara de angelito, esos angelitos que supuestamente no rompen ni un plato pero en realidad te dejan sin vajilla.

Raramente no estaba nerviosa por conocer a sus amigos, más bien estaba nerviosa por no saber cómo actuar cómo la mujer de un jugador profesional pues definitivamente esta era la primera vez que salíamos en plan de recién casados.

El carro se detuvo frente a unas escaleras de madera refinada, al parecer no se trataba de un conjunto residencial si no de una cabaña vacacional. Mi acompañante muy diligente se acercó por el lado derecho del auto y me tendió la mano para salir a su encuentro, a su vez una pareja nos esperaba en lo alto de dichas escaleras.

—Hermano, pensé que no llegarían a tiempo —saludó un hombre, que reconocía muy bien a mi esposo falso. —Como siempre, me alegro de verte compadre. —expuso el amigo de Killiam.

Los dos chocaron sus brazos en un saludo masculino y lleno de fraternidad, me gustaba saber que en la vida solitaria de mi mejor amigo existían este tipo de personas que sacarán su lado real y transparente.

—Te prometí venir, además tu señora esposa no me perdonaría por estar en Minneapolis y no venir a una de sus fiestas más famosas —bromeó Kill, con auténtico humor y jovialidad, —más bien disculpe la tardanza pero una chica muy hermosa me retenía el tiempo.

Escuchaba lo que hablaba y como se reían entre ellos pero no sabía que la chica hermosa de la cual se refería era yo.

—Ya me imagino de qué forma retiene tu tiempo —le siguió el juego el amigo de Kill, a quien no tenía el gusto de conocer o saber si nombre, aún. —Tú debes ser la famosa mujer de la que tanto habla Killiam en los entrenamientos, es un placer conocerte. Mi nombre es Dairo —se presentó el hombre, con un tono de voz grueso y sensual, por su acento podía adivinar que era latino, —-y ella es Almudena, mi esposa.

La pareja conformada por Almudena y Dairo era sin duda de revista; su atractivo era palpable a simple vista y olor pero aún así detrás de todo ese glamour que los definía mantenían un espíritu amable y lleno de contagiosa jovialidad. Ese ímpetu de carisma me mantenía al margen pues yo era más del equipo de los tímidos.

Se Busca Novia Falsa Requisito: Ser Mi Mejor Amiga(Borrador)Where stories live. Discover now