Capítulo 38

159 18 4
                                    

Author's POV

—Amor. — Hyunjin movió el cuerpo de su esposa. —Minnie. — Continuó, pero no obtuvo reacción alguna. —Youngmi-ah. — Sacudió, esta vez con un poco más de fuerza.

—¿Mmm? — Ella despertó a duras penas.

—Amor, la bebé me está pateando de nuevo. — Youngmi rió.

Ya estaba en su tercer trimestre de embarazo y su futura hija parecía reconocer la presencia de su padre, ya que cada vez que dormían y la panzita de Youngmi tenía contacto con el cuerpo Hyunjin, la bebé comenzaba a dar pataditas.

Una vez llegada la mañana, Hyunjin preparó el desayuno como era de costumbre.

Desde que se enteró del embarazo de Youngmi, no dejaba que esta realizara esfuerzos innecesarios.
A ojos ajenos, era claro que la sobreprotegía, pero era su manera de cuidar de su enamorada.

—El menú de hoy es avena. — El muchacho entró al cuarto con un bowl humeante en sus manos.

—Ugh, detesto la avena. — Fingió un llanto.

—Antes te gustaba, Minnie.

—Lo sé, pero últimamente todo me da náuseas.

—El doctor dijo que era normal, pero debes alimentarte, cariño. Hazlo por nuestra pequeña que viene en camino.

—Está bien. — Bufó y metió una cucharada a su boca, sabiendo que era lo correcto.

—Cuando termines, ponte algo cómodo. Iremos de compras. — Hyunjin alzó sus cejas.

—¿No irás a trabajar?

—No, pedí el día libre. Tenemos mucho que comprar y ayer recibí mi pago, así que nos dedicaremos a adquirir todo lo necesario.

—¿Nos faltan muchas cosas? — Siguió desayunando.

—No tantas. Mis padres compraron la cuna y los tuyos el cochecito. Más que nada necesitamos ropa y muchos pañales.

—Okay... Que bueno que no irás al trabajo hoy. — Ella sonrió tenuemente. —Estoy muy sensible estos días y te extraño mucho.

—Yo también te extraño. Me cuesta mucho concentrarme cuando doy clases. No puedo evitar pensar en ustedes. — Puso su mano con delicadeza sobre su abultado abdomen y como por arte de magia, sintió una patadita golpearlo.

—Bebita, si vas a agredirme cada vez que tu papá se acerque, tendré que mantenerlo alejado de ambas. — Se quejó, hablándole a su estómago y causando múltiples risas a su esposo.

(...)

—Leí que debíamos comprar muchos biberones. — Youngmi mencionó cuando pasaron por una tienda de artículos de bebé.

—¿Y eso por qué? Tienen una sola boca. — Hyunjin dijo seriamente, pero luego ambos largaron a reír.

—No lo sé, pero mi mamá me dijo lo mismo. — Alzó sus hombros.

—Hablando de tu madre, ¿no crees que podríamos pedirle que venga a quedarse algunos días a la ciudad?

—¿Lo dices por algo en específico?

—No me gusta que pases tanto tiempo sola. Me preocupa. — Reconoció.

—Estoy bien, Jinnie. ¡Oh por Dios, casi lo olvido! — Miró con gran emoción al más alto.

—¿Qué pasa?

—¡Felix vendrá a visitarnos hoy!

—¿Qué no estaba en Australia?

VIDA DE COLORES - HWANG HYUNJINWhere stories live. Discover now