Esperándote

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-Era extraño, demasiado extraño, la vida se había cortado o algo parecido, era como si el tiempo se hubiera detenido y yo fuera la única cosa que siguió su curso,todos parecían los mismos, todos parecían estar en un mundo en el que no avanzaban.

Momento...solo era yo, volviendo a pensar en ti.-


La puerta de una habitación se abrió dejando ver a un hombre joven, su mirada se poso en la cama vacía y después al reloj de la mesita de noche que estaba en silencio, se dio cuenta que había dejado de avanzar la manecilla, pero realmente no le to...

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La puerta de una habitación se abrió dejando ver a un hombre joven, su mirada se poso en la cama vacía y después al reloj de la mesita de noche que estaba en silencio, se dio cuenta que había dejado de avanzar la manecilla, pero realmente no le tomo importancia. Suspiro y se adentro en la habitación,se sentó en la cama, no recordaba que estuviera tan suave, o tal vez solo era el y su cuerpo acostumbrado al suelo duro de los bosques o de cualquier lugar que el visitara, cuando viera a Naruto le diría que estaba cansado de que lo mandara siempre a misiones tan largas, a un sabiendo la fecha importante que se acercaba.

Escucho el ruido de puerta principal abrirse, y una voz risueña que el bien conocía, pero había alguien mas entrando con ella al parecer, con fastidio se levanto de la suave cama y camino hacia el ruido, lo que observo lo dejo perplejo, era extraño, porque ahí no había nadie. La puerta no se había abierto y la voz de su esposa no estaba.

-¿Hinata?- Llamo con un poco de miedo en su voz, algo inusual para el.

Pero la nada le respondió, ningún ruido o movimiento.

Eso era extraño, el sabia que su esposa estaría ahí para recibirlo como siempre, esperando su regreso, tal vez el olor de tomates siendo cocidos o algún postre de dulce que ella siempre comía. Camino un poco mas para revisar las demás habitaciones, nada. No había nadie en ninguna parte, la angustia y la ansiedad inicio a generarse en su cuerpo, desde sus manos hasta el pecho,el estaba solo.

El no quería estar solo, no mas. La casa comenzó a agobiarlo, empezó sentir como todo se hacia mas pequeño y como todo dejaba de tener color. Dio un paso hacia la salida, pero no había ninguna puerta. El aire dejo de estar y el ahogo estaba ahí, cerro los ojos con fuerza y al abrirlos el sol lo cegó, las aves cantaban y el aire pegaba con suavidad en su mejilla y su cabello. Es verdad, el seguía en aquella estúpida mision, lo bueno que había escuchado un riachuelo cerca, necesitaba mojarse la cara para despejarse de esa horrible pesadilla, realmente lo había dejado con los sentidos en alto y un poco nervioso, debía enfocarse.

La tarde llego, Sasuke seguía avanzando, desde lo lejos podía divisar las grandes puertas de la aldea, soltó un suspiro, realmente estaba cansado de esas misiones, capturar a alguien tan débil debía ser un delito para el, la única dificultad que p...

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La tarde llego, Sasuke seguía avanzando, desde lo lejos podía divisar las grandes puertas de la aldea, soltó un suspiro, realmente estaba cansado de esas misiones, capturar a alguien tan débil debía ser un delito para el, la única dificultad que podría haber es que esta lejos y en un lugar que el desconocía.

Saludo a los guardias con un movimiento de cabeza y desaparecía a su ojos. Los dos ninjas que estaban ahí solo siguieron haciendo su trabajo, estaban acostumbrados a los actuares de el ultimo Uchiha, al menos ahora era menos gruñón desde que estaba casado con la princesa Hyuga.

Sasuke se detuvo un momento cuando tomo la perilla de la puerta, aquel sueño de hace unos días volvió a su mente, respiro profundo y sin darse cuenta aguanto la respiración, abrió poco a poco la puerta, no había ningún ruido en la casa cosa que le dio una mala espina, camino un poco, la cocina estaba en silencio, pero había comida a medio preparar, verduras cortadas y un cuchillo dejado al azar en la mesa, un poco preocupado y ahora con mas sigilo camino por la casa, casi sentía la tensión normal de que una pelea se aproximaba, tomo la empuñadura de sus espada, se dirigió al dojo de la casa y si le hubieran preguntado de las cosas extrañas que a presenciado ese seria uno de esos momentos.

Su esposa estaba de cabeza, con los brazos extendidos, sus ojos cerrados con fuerza y sus mejillas sonrojadas, su cara se veía un poco roja, tal vez por el tiempo que ya debe llevar en esa posición, no sabia si preguntar o hacer como que nunca estuvo ahí. Opto por lo mas normal que alguien haría.

-¿Que se supone que estas haciendo?- Hablo con un tono de duda real. Realmente quería saber, era realmente extraño.

Hinata al escuchar la voz de Sasuke soltó todo el aire que tenia y cayo de lado, el Uchiha solo la miro con mas duda, una pequeña culpabilidad se sintió en su pecho al asustarla y no sostenerla al caer. Pero enserió necesitaba saber que sucedía.

La pelinegra se acomodo en el lugar, se levanto con vergüenza cuando se dio cuenta que debió verse graciosa en esa pose. Miro la duda en el rostro de su esposo y sonrió.

-Es que tengo Hipo-

La duda creció mas y ella continuo - Eh estado teniendo Hipo estos últimos días y cansada de probar de todo, trate lo ultimo que se me ocurrió...

-Entonces pararte de cabeza y sostener el aire mientras aprietas los ojos funciona.

Era el turno de Hinata de mirarlo con duda y pena. Pero el respondió antes de que ella preguntara - Ya no tienes Hipo-. La cara de sorpresa en la Hyuga fue mucha, se dio cuenta de que en efecto ya no tenia esa incomoda sensación cuando el hipo esta presente, en el pequeño transcurso de Hinata acercándose a el pudo notar que las uñas de los pies de su esposa tenían un bonito color lila y que su cabello estaba un poco desarreglado y su cara un poco hinchada, al parecer lo estuvo esperando acostada.

El abrazo de Hinata lo saco de su pensamiento, el la envolvió contra el y respiro la fragancia de su cabello, realmente la extraño, a ella y sus onigiris de tomate.

Una pequeña risa de parte de Sasuke sonó, Hinata lo miro desde abajo -¿que sucede?-

-Tal vez lo que te quito el Hipo fue el susto de verme- dijo con una sonrisa cínica.

Hinata lo miro con un puchero pero se rio de su ocurrencia, negó un poco y lo volvió a abrazar con un poco mas de fuerza. -Estaba esperándote, bienvenido a casa, esposo-.

Sasuke sonrió con calma -Gracias "esposa"- dijo con burla.

La risa de ambos lleno la habitación, aquel juego que ellos tenían realmente le gustaba.

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Bueno, me desaparecí por mucho tiempo, pero ahora estoy aquí tratando de empezar el SasuhinaMonth, espero poder cumplir con la mayoría ya que por motivos personales incluso el imaginar algo es muy tedioso.

Espero les haya gustado este pequeño Shot, la siguiente pagina solo es una pequeña pagina de Hinata pasando la espera <3 pero con algo melancólico de mi parte. Me gusto que este escrito haya sido mas bonito el final de lo que tenia planeado c:

Esperándote (SasuHina) One-shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora